| Compañero de un sospechoso

Un nuevo detenido por el crimen de Lola, pero la causa sigue en foja cero

En la causa la hubo 16 detenidos. El último arrestado es compañero de trabajo del sospechoso de quien hoy se dio a conocer su identikit. Esperan resultados de pericias.

El sospechoso buscado por la policía.

El sospechoso buscado por la policía.

Por Ignacio Ramírez

En sólo siete días, hubo hipótesis antagónicas, pericias semiológicas, autopsias psicológicas, varios perejiles y un total de 15 detenciones. El horror en Rocha sumó un nuevo detenido, en el crimen de Luna “Lola” Chomnalez, de 15 años.

A siete días del hallazgo macabro de su cuerpo en la bucólica playa de Valizas, en el Departamento Rocha, en Uruguay, hay un nuevo detenido, y ya van un total del 16: es el saldo de lo que dejó el crimen hoy. El expediente con 15 indagatorias, y varias hipótesis, sigue en foja cero.

Sin un móvil claro, ni pistas reales, un identikit de un hombre de entre 40 y 50 años, parecería dar un nuevo giro a la causa de las mil detenciones a la espera del resultado de las pericias ordenadas.

El último detenido surge de las 13  indagatorias generadas el viernes 2 y el sábado 3 por personal de la Unidad de Análisis de Hechos Complejos en la Seccional Cuarta de Castillos, a partir del cual se gestó  el perfil del último apresado, el hincha de Peñarol.

La pesquisa logró determinar que el nuevo detenido, trabajó en Valizas realizando reparaciones en el techo de una vivienda. El demorado por la policía uruguaya, es el compañero de trabajo de esta persona aún buscada. El identikit elaborado da cuenta de un hombre de 1,70 – 1,75 metros de altura, «muy delgado», cutis «trigueño», de entre 40 y 50 años,  cabello  «corto, ondulado y canoso»,  «ojos marrones claros», y  la piel «curtida por el sol».

La  jueza penal de Rocha, Marcela López, sigue sin dar en la tecla de la causa, que preocupa al gobierno de Uruguay, por las consecuencias que podría tener para el turismo.

La investigación judicial trata de reconstruir la noche del sábado 27 y las primeras horas del domingo 28 en Valizas, ya que allí podría estar la clave del crimen. “No puede puede existir un homicidio que tiene como víctima una persona que caminó 30 cuadras. Hay gente que tiene que saber más de lo que dice”, aseguran los efectivos de la Unidad.

Cabe recordar que las pesquisas sobre el homicido de la adolescente son encabezadas por la Unidad de Análisis de Hechos Complejos de la Policía de Montevideo, que está bajo el mando del jefe de Policía, Inspector principal (r) Mario Layera. El Instituto Técnico Forense (ITF) deberá entregar los resultados de los cuchillos secuestrados en la casa donde se hospedaba Lola con su madrina.

El pasado jueves, la madrina de Lola Chomnalez y su esposo se negaron a declarar por consejo de sus abogados. La razón: el interrogatorio iba a ser  grabado para que fuera posteriormente analizado por un perito semiólogo que envió al Juzgado rochense el Ministerio del Interior.

El abogado Gustavo Bordes, que se nego a la actuación de la semióloga, dijo  que “fue una prueba que no fue pedida por la jueza, por la fiscal ni por la defensa, sino que se trató de una semióloga enviada por el Ministerio del Interior a modo de colaboración”. “No era una herramienta procesal pedida ni por la fiscalía ni por la jueza”, insistió el abogado defensor.

El crimen de Lola, tiene mucho ruido y pocas nueces; el fantasma de la impunidad lo sobrevuela.


Compartir: 
Etiquetas: