La camioneta en la que habían escapado.

Martín Lanatta uno de los tres prófugos más buscados de la Argentina fue detenido hoy en el pueblo de Cayastá, después de trece días de haber tenido en vilo a las fuerzas de seguridad de todo el país, burlado a la policía bonaerense, arrestado por los agentes de un pueblo de no más de cinco mil habitantes en el centro de la provincia de Santa Fe.

Primero cayó Martín Lanatta, luego su hermano Cristian y Víctor Schillaci, consiguieron fugarse a pesar de que en un primer momento se informó que habían sido arrestados los tres. En el arresto hasta se utilizaron caballos de un paisano del pueblo que se lo prestó a los agentes para perseguir a los fugados de la cárcel de General Alvear.

Los tres prófugos lograron evadir el cerco que se les había hecho el jueves último cuando se tiroteraron con efectivos de la Gendarmería que los habían ido a buscar por orden del juez federal Sergio Torres sin participación de la policía santafesina.

Los tres hombres secuestraron a un ingeniero en la localidad de San Carlos y se llevaron una camioneta Amarok blanca. Estuvieron durante 48 horas en su departamento de la ciudad de Santa Fe y luego plotearon la camioneta con letras y símbolos de la Gendarmería.

Esa camioneta volcó en las inmediaciones de Cayastá, que según Crónica TV significa hasta acá llegaste, y allí fue detenido Martín Lanatta, quien habría resultado herido por el vuelco. Sus dos cómplices escaparon y seguían siendo buscados en la misma zona.

Lo llamativo es que Lanatta fue arrestado por la policía santafesina, que había sido marginada de los operativos del jueves, cuando habían escapado de los gendarmes, luego de dos tiroteos, en los que hubo dos heridos.

La misma policía que fue muy cuestionada por los vínculos de sus jefes con narcotraficantes de la provincia. Por eso aún quedan muchas dudas, ya que los prófugos pudieron escapar de San Carlos, llegar hasta la ciudad de Santa Fe, donde mantuvieron cautivo a un ingeniero, y luego volvieron a escapar, hasta que volcaron en una zanja.

Lanatta, después de su arresto.