El Pro ya tomó una determinación en el Consejo de la Magistratura de la Ciudad: antes de fin de año avanzará contra el juez contravencional Roberto Gallardo, funcionario que le ha traído más de un trastorno al jefe de gobierno porteño Mauricio Macri. El magistrado podría terminar sometido a un jury que promete dividir las aguas en un Consejo que habitualmente funciona coordinado.

El juez Gallardo le dio varios dolores de cabeza a Macri.

En la pelea contra Gallardo juegan para el macrismo el abogado Jorge Enríquez, los jueces Ricardo Baldomar, Alejandra Petrella y Gustavo Letner y los designados por la Legislatura María Laura Grindetti y Sebastián De Stefano. Del lado del juez solo quedaría el kirchnerista Juan Manuel Olmos y el abogado Daniel Fábrega (una especie de delegado en el Consejo del titular del Colegio Público de Abogados de la Capital, Jorge Rizzo). Más dudas sobre qué haría la abogada Alejandra García quien si bien no comparte los métodos de Gallardo, es socia en un estudio jurídico con Olmos.

La determinación de Gallardo de entender como inconstitucional el veto de Macri a una ley referida al aborto habría sido el punto de inflexión para avanzar contra el juez. El alcalde conversó la situación con Enríquez y el ministro de Justicia y Seguridad, Guillermo Montenegro. La elección del interlocutor en el Consejo no es azarosa: Enríquez siempre ha sido un hombre de buena relación con el papa Jorge Bergoglio y fue uno de los primeros en fustigar a Gallardo por su fallo sobre el veto. Además, ya en un plano más frívolo, fue el encargado de extender la invitación a Macri para que este fuera el orador en la cena por los 100 años del Colegio de Abogados de la Ciudad, que reúne a los letrados de todos los estudios empresariales.

Enríquez ya ha sondeado a los jueces que integran el Jurado de Enjuiciamiento al que debería someterse Gallardo: la situación será adversa al juez quien ya despierta ciertos reproches entre los propios magistrados más cercanos al ala progresista dentro de la justicia porteña.

Las acciones contra Gallardo solo serían el principio de una avanzada frontal dado que en el entorno de Macri son varios los que le recomiendan hacer pesar la mayoría y remover a Olmos de la presidencia del Consejo. “Hasta ahora nunca nos complicó, que siga viajando”, responde Macri con una indeferencia que no desalienta a sus laderos: “con la Corte porteña e Inés Weimberg de Roca al principio decía lo mismo, dudaba de postularla ya que decía que como estaban las cosas iban bien y al final no paró hasta que la hicieron jueza del Tribunal”, afirman quienes están a su lado.