| Noticias

El Gobierno nombra a un sacerdote como nuevo titular del Sedronar

Molina tiene buena relación con la Presidenta.

Molina tiene buena relación con la Presidenta.

El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, anunció esta tarde que el nuevo titular de la Secretaría de Prevención de la Drogadicción y Lucha contra el Narcotráfico (Sedronar) será el sacerdote Juan Carlos Molina.

Capitanich lo anunció minutos después de las 18 desde la Casa de Gobierno, donde contó que Molina ha prestado servicios, entre otros lugares, en Haití y que ha realizado tareas en colaboración con la ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner.

Molina es un sacerdote cercano a los Kirchner. De acuerdo a lo que publica en su cuenta de Twitter, el religioso es asesor ad honorem de la ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner. En la foto de su perfil, se puede ver a Molina junto a la Presidenta.

«Deberá hacer una convocatoria amplia, plural y democrática para todas las organizaciones que trabajan en todas las adicciones en general y en la drogadicción en particular», explicó el jefe de Gabinete.

Capitanich explicó el «nuevo abordaje» que tendrá el organismo, ahora más vinculado al trabajo social que a la lucha de las organizaciones criminales. «Es necesario separar el componente de seguridad y el de abordaje social, que tendrá la Secretaría a través de ese nuevo abordaje», sostuvo Capitanich. Y agregó: «Desde la inclusión social, las oportunidades laborales, el deporte y la cultura es lo que verdaderamente nos permitirá recuperar a jóvenes».

Capitanich informó que mañana mantendrán la primera reunión de trabajo con Molina, en la que definirán los recursos presupuestarios que tendrá a disponibilidad y determinarás las metas de gestión.

La titularidad del Sedronar se encontraba vacante desde marzo pasado, cuando reanunció al cargo el ex canciller Rafael Bielsa, quien pasó a desempeñarse en la empresa Aeropuertos Argentina 2000.

Con el nombramiento de Molina, es evidente que el Sedronar hará hincapié en las tareas de prevención de la drogadicción y de los programas de atención a adictos. De modo que la tarea de la represión del narcotráfico queda como exclusiva responsabilidad de las fuerzas de seguridad.


Compartir: