D´Alessio fue allanado por dos jueces.

La situación del abogado Marcelo D’Alessio, denunciado por extorsión en dos expedientes, uno que tiene el juzgado federal de Dolores, a cargo de Alejo Ramos Padilla, y otro en manos de Julián Ercolini, se complica con el paso de los días.

D´Alessio fue denunciado por el empresario agropecuario Pedro Etchebest,quien aseguró que le había pedido 300 mil dólares para no quedar detenido en la causa de las fotocopias de los cuadernos del juez Claudio Bonadio, que se inició a partir de una presentación del fiscal Carlos Stornelli. Etchebest también denunció al fiscal, ya que el intermediario le aseguró que el dinero era para él.

Este martes el propio Stornelli terminó denunciado a D´Alessio, que se presentó ante Etchebest como colaborador del fiscal que interviene en la causa de corrupción más importante que se tramita en el país. Esa denuncia quedó en manos de Ercolini, por lo que ahora es investigado por dos magistrados federales por el mismo tema.

Stornelli admitió que conocía a D´Alessio y que estuvieron reunidos en la confitería del balneario CR en Pinamar, pero negó que se hubieran reunido para hablar del presunto soborno como dijo el intermediario. En Tribunales, quienes no están de un lado u otro de la grieta, dicen que lo que se debe determinar es si efectivamente D´Alessio pidió el dinero para el fiscal o fue una maniobra que buscó armar por su propia cuenta y riesgo, como se ve ahora, que temer ir detenido.

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Pero D´Alessio tenía además una causa anterior que se tramitaba en la Justicia federal de Lomas de Zamora, acusado de lavado de dinero proveniente del narcotráfico. El miércoles hubo dos allanamientos en la casa del supuesto intermediario del fiscal en el partido bonaerense de Esteban Echeverría, donde tiene su domicilio en un conocido country de la zona sur del Gran Buenos Aires. Y los hallazgos fueron sorprendentes.

Según informaron fuentes judiciales, los allanamientos «no fueron simultáneos», sino que primero fue el que ordenó el juez de Dolores Alejo Ramos Padilla, y luego el que dispuso el juez de Lomas de Zamora Federico Villena.

El juzgado de Lomas de Zamora tramita una causa que data de 2016, por la que D’Alessio tiene inhibidos sus bienes y que es por supuesto lavado de dinero, tras una denuncia anónima que advertía sobre las andanzas del abogado.

En el marco de esa causa, el juez Villena le pidió a su par de Dolores que lo certifique de la existencia de nueva causa abierta contra D’Alessio en la que se lo investiga por la supuesta extorsión al productor Etchebest.

El allanamiento ordenado por Ramos Padilla incluyó la presencia del Tribunal de Tasación, por lo que se cree que el objetivo es la valuación de los bienes del abogado para un eventual embargo.

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Los allanamientos tuvieron lugar en la casa que tiene el abogado en el country Saint Thomas, en la localidad de Canning, en el partido de Esteban Echeverría, que ya había sido allanada la semana pasada por orden del juez de Dolores, cuando la existencia de la causa aún no había salido a la luz.

En ese procedimiento se llevaron “47 bolsas de material de todo tipo: encontró armas de altísima tecnología, una placa de la Drug Enforcement Administration, remeras del FBI, chalecos antibalas, equipamiento tecnológico de espionaje, vehículos de alta gama con balizas de las fuerzas de seguridad, y fundamentalmente computadoras, celulares, una enorme cantidad de documentación y anotaciones que están siendo aún analizada”, según consignó Página 12.

Pero lo más llamativo es lo que se encontró en el allanamiento del miércoles. “D’Alessio tiene una mansión en el country Saint Thomas, un departamento en Puerto Madero, otra propiedad en el Chaco, diez autos de lujo, dos motos de altísima cilindrada, un yate, una colección de 50 relojes de alto valor, incluyendo un Double Tourbillon que, de ser original, vale alrededor de 200.000 dólares”, consignó Página 12.

“Los funcionarios del juzgado de Ramos Padilla fueron al country con un listado de los autos que D’Alessio tiene a su nombre. Por de pronto, una camioneta Range Rover nueva, cuyo precio está por encima de los 100.000 dólares. Es la camioneta con la que fueron a dar una vuelta, manejando Stornelli, en Pinamar. En un audio grabado por el empresario extorsionado, D’Alessio cuenta que Stornelli tiene dos Range Rover, pero de modelos anteriores. En la nómina de autos a nombre de D’Alessio, figuraban otra camioneta enorme, la RAM 2500 –vale unos 50.000 dólares–, un Scania, un BMW X6, dos camionetas Hilux, un Peugeot 308 y dos Chevy de colección. La mayor parte de esos vehículos no se encontraron, pero en el allanamiento anterior sí habrían encontrado una camioneta Audi y un Toyota Corolla. D’Alessio alega que alguno de los autos los vendió, aunque todos figuran a su nombre. También se deshizo de una Ferrari de su propiedad”, agrega el diario.