Antes de dar la señal de largada para el blanqueo de capitales, Alberto Abad decidió deshacerse de una bomba que amenazaba con estallar en sus manos y que ahora deberán desactivar a una cuadra de su despacho. Preocupado por su seguridad, el director de la AFIP había ordenado blindar el Volkswagen Vento que le asignaron […]