Representantes del Gobierno nacional expresaron su «solidaridad» con el juez de la Corte Suprema Ricardo Lorenzetti, quien sufrió una protesta en su casa de la ciudad santafesina de Rafaela, y abogaron para que las «instituciones de la democracia trabajen libres de presiones».
El jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, manifestó su «preocupación» ante la protesta que sufrió ayer Lorenzetti y sostuvo desde Twitter que el país necesita que las «instituciones de la democracia trabajen libres de presiones».
El ministro del Interior, Eduardo «Wado» De Pedro, llamó a que «todos los sectores democráticos de nuestra sociedad acompañen este límite que merece un unánime y contundente repudio», al pronunciarse sobre la protesta que sufrió Lorenzetti.
«Hay momentos donde todos debemos poner un límite: el respeto a la convivencia democrática y sus instituciones. La protesta en la vivienda particular de un ministro de la Corte Suprema, donde vive con su familia, motorizada por el macrismo, es un hecho de extrema gravedad», expresó el titular de Interior en su cuenta de Twitter.
Hay momentos donde todos debemos poner un límite: el respeto a la convivencia democrática y sus instituciones.
La protesta en la vivienda particular de un ministro de la Corte Suprema, donde vive con su familia, motorizada por el macrismo, es un hecho de extrema gravedad.
— Wado de Pedro 🇦🇷 (@wadodecorrido) September 28, 2020
En ese marco, agregó: «espero que todos los sectores democráticos de nuestra sociedad acompañen ese límite, y se pronuncien ante este hecho que merece un unánime y contundente repudio».
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Por su parte, la ministra de Justicia, Marcela Losardo, expresó también por redes sociales su «solidaridad y profundo repudio» y reafirmó el «compromiso» del Gobierno de Alberto Fernández por una «Justicia independiente».
Intolerable
En tanto, el viceministro de Justicia, Juan Martín Mena, sostuvo que no pueden «tolerarse» escraches como el que sufrió Lorenzetti y consideró «inadmisibles» los «aprietes e intimidaciones» de los que viene siendo objeto el máximo tribunal en las últimas semanas.
«La marcha al domicilio de Lorenzetti constituye un hecho de enorme gravedad», sostuvo Mena, en declaraciones a Télam, y señaló además que se trata de una «práctica» a la que «nos quieren acostumbrar desde que en este país gobernó Mauricio Macri», por lo que pidió que «el PRO y el expresidente salgan a dar la cara».
«No podemos tolerar estas prácticas, de enorme gravedad institucional, y que buscan generar hechos de violencia», advirtió.
Por redes sociales, el vicepresidente de la Cámara de Diputados y jefe del PJ, José Luis Gioja, se sumó a los mensajes de «solidaridad» y abogó por una «Justicia independiente, regida por la ley y no a la merced de los aprietes promovidos por algunos inescrupulosos».
Un grupo de manifestantes opositores protagonizaron ayer una caravana de protesta frente al domicilio de Lorenzetti, a días de que ese cuerpo defina los recursos presentados por los magistrados Pablo Bertuzzi, Leopoldo Bruglia y Germán Castelli, cuyos traslados fueron revocados por el Senado.
Acuerdo el martes
El presidente de la Corte Suprema, Carlos Rosenkrantz, convocó a un «acuerdo extraordinario» para el próximo martes para analizar si concede el pedido de «per saltum» de los tres jueces.
Lo hizo para que se resuelva la cuestión de fondo, respecto de si sus respectivos pases por decreto durante el anterior Gobierno de Macri se ajustaron o no al trámite de designación previsto en la Constitución.