Tal como había adelantado CyR, finalmente el juez federal Arial Lijo sobreseyó al gremialista Gerardo Martínez en la causa que lo vinculaba con pertenecer al Batallón de Inteligencia 601 durante la última dictadura militar.
Lijo ya había archivado la causa contra Martínez, impulsada por organizaciones defensoras de los derechos humanos pero luego esa decisión fue revocada por la Cámara Federal porteña, que ordenó una serie de medidas de prueba que Lijo, el mismo juez que procesó al vicepresidente Amado Boudou en la llamada «Causa Ciccone», llevó a cabo en los últimos meses.
En las últimas semanas Martínez, que estuvo con la presidenta en el último viaje a Nueva York, había acentuado su perfil opositor al Gobierno y dejaba en claro su cercanía tanto con Mauricio Macri como con Sergio Massa.El juez había tomado en cuenta un informe de la Secretaría de Derechos Humanos, según el cual los casos de persecuciones a trabajadores de la construcción durante el régimen «fueron anteriores al 1 de marzo de 1982, año en el que, según registró Martínez, fue incorporado al Ejército argentino como agente civil de inteligencia».