El ministro del Interior, Wado de Pedro, le pidió explicaciones esta tarde al jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, por la represión policial a los asistentes al cortejo fúnebre de Maradona.
El operativo de seguridad fuera de la Casa Rosada fue responsabilidad de la Policía de la Ciudad, que depende de la Rodríguez Larreta y de Diego Santilli.
Pero en un determinado momento los miles de asistentes comenzaron a ser reprimidos por la policía de la ciudad con balas de gomas y camiones hidrantes.
Le exigimos a @horaciorlarreta y @diegosantilli que frenen ya esta locura que lleva adelante la Policía de la Ciudad. Este homenaje popular no puede terminar en represión y corridas a quienes vienen a despedir a Maradona.
— Wado de Pedro 🇦🇷 (@wadodecorrido) November 26, 2020
Tras el ingreso de fanáticos en la Casa de Gobierno, el féretro de Maradona se retiró esta tarde del hall central de la Casa Rosada.
En la Casa Rosada
El ingreso de hinchas en el lugar hizo que el personal de seguridad de la sede de Gobierno llevara los restos del Diez hasta el Salón de los Pueblos Originarios, donde se lo mantuvo bajo llave junto a la familia, a salvo de los desbordes.
Paralelamente, el perímetro de la Casa Rosada se protegió por un cordón policial y un fuerte retén del cuerpo de Infantería por la entrada principal de Balcarce 50.
La invasión del recinto se produjo cerca de las 15.30 ante la concentración de hinchas en el ingreso al velatorio, que en principio iba a terminar a las 16.30 y luego se extendió hasta las 19 con el acuerdo de la familia del astro.
Cuando efectivos de seguridad intentaban desagotar el hall central, un grupo de fanáticos ingresó al Patio de las Palmeras, donde permaneció entonando cánticos de homenaje al astro, pero luego los desalojaron.
Más tiempo
La decisión de extender el horario del funeral se adoptó frente a los desbordes en la Plaza de Mayo y sus alrededores por la enorme cantidad de personas.
Cerca de las 14, la policía de la Ciudad cortó el acceso de público en la intersección de Bernardo de Irigoyen y Avenida de Mayo, retén inicial de acceso al velatorio, y allí se registraron los primeros incidentes.
Más tarde, los disturbios se trasladaron al sector vallado, comprendido entre ese punto y la Casa de Gobierno, donde se registraron corridas, gases lacrimógenos y detonaciones de balas de goma.