Una de las carteras más calientes del Gobierno volverá a quedar en manos de una mujer: la presidenta Cristina Fernández decidió reemplazar al ministro de Seguridad de la Nación, Arturo Puricelli, quien renunció a su cargo y será reemplazado por María Cecilia Rodríguez.
Puricelli había ocupado a su vez el puesto que había dejado Nilda Garré, quien pasó a ser embajadora argentina en la OEA en junio pasado, después de haber estado al frente de la cartera de Seguridad, desde diciembre de 2010, luego de haber pasado por cartera de Defensa.
Garré había abandonado su cargo después de haber mantenido una pésima relación con el secretario de Seguridad, Sergio Berni, quien llevó adelanta una conducción casi paralela del Ministerio, mientras se mostraba al frente de los operativos, como un hombre de acción.
Rodríguez tiene 46 años y es miltante de La Cámpora. Ya ha ocupado varios cargos en el Ejecutivo; hasta hoy, estaba al frente de la Secretaría de Coordinación Militar de Asistencia a Emergencias. Ese organismo tuvo una actuación destacada durante las inundaciones en La Plata.
Sus vínculos más estrechos los tiene con Agustín Rossi, hoy ministro de Defensa, y con Sergio Berni, secretario de seguridad, con quién ya trabajo en el Ministerio de Desarrollo Social. Allí se desempeñó como directora nacional de Asistencia Crítica de la Subsecretaría de Abordaje Territorial.
Rodríguez también fue coordinadora técnica de Asistencia Social Directa, Subsecretaría de Abordaje Territorial, en el ministerio que desde el próximo miércoles (día de la jura) conducirá.
En cuanto a su formación, María Cecilia es licenciada en Ciencias Políticas (UBA-El Salvador), y se desempeña como docente en varios establecimientos.
También se destaca dentro de su trayectoria, su participación en misiones humanitarias en Haití, por las cuales fue condecorada por Cristina Fernández.
La jura de Rodríguez se llevará a cabo en el mismo acto en el que Cristina también le tomará juramento ael cura Juan Carlos Molina como nuevo titular de la Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y la Lucha contra el Narcotráfico (Sedronar).
Los antecedentes de la nueva ministra se acercan más al manejo de catástrofes y situaciones de crisis en emergencias que poco tienen que ver con inteligencia criminal o tareras de prevención de la inseguridad o el desarrollo de políticas públicas específicas de la materia.
Algo parecido podría decirse de Puricelli, quien llegó al Ministerio de Seguridad procedente de Fabricaciones Militares sin haber contado con ningún antecedente sobre las políticas del área a su cargo.