Rafa Di Zeo y Mauro Martín en la cancha de Boca.

El ministerio de Seguridad de la Nación anunció la creación de un Registro de Personas con Derecho de Admisión bajo su órbita, entre una serie de medidas oficiales que tienen como fin «acabar con las agresiones en el fútbol y la problemática de las barras bravas».

De esta manera, el Gobierno relevó a los clubes de la obligación de ejercer la tarea de filtrar a los violentos, como ocurre hasta ahora, aunque les solicitó su «colaboración» a todos los afiliados a la Asociación del Fútbol Argentino (AFA).

La medida no puede dejar de analizarse sin considerar que el presidente Macri fue presidente de Boca y que el actual titular del club, Daniel Angelici, es su principal operador en la justicia federal. Al ser el Estado el responsable le quita a los clubes hacerse cargo de quienes puedan entrar y quién no.

Y Boca tuvo muchos problemas con las barras en los últimos años. Sin ir más lejos, el año pasado sus hinchas provocaron un escándalo en un partido por River cuando tiraron gas mostaza a los jugadores rivales, lo que provocó la salida del club de la competición internacional.

Además de los datos personales de las personas a quienes se incluya en la lista, la normativa oficial prevé que el Registro contendrá el nombre del club y los motivos por los cuales se le impuso la pena.

También hubo polémica cuando se advirtió la presencia en la cancha del condenado jefe de la barra Rafa Di Zeo durante el partido de regreso de carlos Tévez y el argumento para permitirle la entrada, era que no tenía ningún impedimento, debido a que ya había cumplido la condena. En ese partido también estuvo Mauro Martín, también investigado en un causa judicial.

“Vamos a crear un Registro Nacional de Personas con Derecho de Admisión en Espectáculos Futbolísticos con nombre y apellido, y los motivos por los cuales la medida fue impuesta”, sostuvo el Ministerio de Seguridad en su página de facebook.

Todo esto se da en medio de negociaciones entre el Estado Nacional y la AFA sobre los costos de los operativos policiales. El ministerio a cargo de Patricia Bullrich, le manifestó a la AFA, a River y a Boca su preocupación por los hechos de violencia protagonizados por futbolistas de ambos equipos en el último Superclásico que se jugó el pasado sábado.

En ese sentido, se comunicó que «se le requirió a la AFA que comunique las penas que el Tribunal de Disciplina dictamine en relación a lo ocurrido en el partido. Y además, se le pide que de aquí en adelante, notifique las sanciones disciplinarias que en el futuro se apliquen en casos similares».

Dentro de los proyectos que plantea el ministerio de Seguridad, se incluyó «la implementación de un plan de formación para los jugadores, cuerpo técnico y árbitros de todas las divisiones sobre los valores del juego limpio y el respeto».

Según el anuncio, estas medidas buscan «acabar con las agresiones que, desde hace años, se observan en los estadios de nuestro país» y «erradicar cualquier tipo de comportamiento antideportivo», «para que los argentinos vuelvan a disfrutar en paz de los espectáculos deportivos».