| Homicidio agravado

Quedó detenido el policía que mató a un adolescente por la espalda

Un agente dijo que tres adolescentes lo quisieron asaltar. Mató a uno e hirió a los otros dos, pero no se encontraron rastros de un tiroteo. Los proyectiles eran sólo de él.

Las pericias están a cargo de la Gendarmería.

Las pericias están a cargo de la Gendarmería.

El policía que mató de un balazo en la nuca a un adolescente de 14 años e hirió a otros dos chicos a los que acusó de robarle a mano armada cuando se hallaba junto a su ex pareja en el partido bonaerense de San Martín se negó el miércoles  a declarar ante el fiscal de la causa y seguirá detenido por «homicidio agravado», informaron fuentes judiciales.
Se trata del subteniente Hugo Daniel Pos (43), quien fue indagado por el fiscal Marcelo Brocca, bajo la imputación del delito de “homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego” de Rodrigo Alejandro Correa (14) y las tentativas en perjuicio de los dos acompañantes de éste.
Fuentes judiciales informaron que, por consejo de su abogado particular, el policía se negó a declarar y seguirá detenido a disposición del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil de San Martín, mientras se resuelve su situación procesal.
Por su parte, el fiscal Brocca se trasladó esta tarde al Hospital Castex de dicho distrito del noroeste del conurbano donde los dos acompañantes de Correa, de 14 y 16 años, permanecen internados a raíz de las heridas de bala sufridas en el asalto, uno en el abdomen y el otro en una pierna.
El instructor judicial indagó a ambos por el “robo calificado por el uso de arma -no secuestrada- y en poblado y en banda” denunciado por el policía Pos.
“Los dos jóvenes internados declararon sin ningún inconveniente y dieron su versión de los hechos que, por supuesto, estará sujeta a comprobación”, explicó el fiscal al retirarse del centro asistencial y se excusó de brindar detalles sobre el contenido de estas indagatorias ya que es “justamente la materia a investigar”.
“Son hipótesis sujetas a comprobación a partir de los elementos de prueba que estamos colectando. Faltan hacer pericias”, indicó Brocca y adelantó que recién el lunes próximo se realizará el peritaje balístico sobre el arma del policía y las vainas secuestradas en la escena del crimen, en el Instituto de Ciencias Forenses de Lomas de Zamora, dependiente del Ministerio Público Fiscal.
Consultado sobre las acusaciones a Pons, de un lado, y a los otros dos chicos, del otro, el instructor judicial explicó que “son calificaciones e imputaciones provisorias” basadas en elementos que él considera “suficientes” pero que con el devenir de la investigación pueden modificarse.
“Sería aventurado de mi parte, casi temerario, decir hoy, con lo que tengo en la causa, si hubo o no un intercambio de disparos. Sí es cierto que todas las vainas colectadas son del mismo calibre. Pero no se puede ignorar que un revólver, por ejemplo, no eyecta vainas servidas”, indicó.
En ese sentido, el fiscal señaló que en el lugar del hecho no se secuestró otra arma de fuego además de la del efectivo policial y que no se recuperó ninguno de los elementos que Pos dijo que le robaron durante el asalto.
Luego, Brocca solicitó públicamente a la ciudadanía que aquellas personas que hayan sido testigos del hecho se presenten a declarar a la fiscalía.
“Es importante que todos nos comprometamos con estas cuestiones de seguridad. Nosotros dependemos de la prueba para llevar adelante la investigación”, concluyó el fiscal.
El hecho investigado se registró la noche del lunes último, cuando Pos salía junto a su ex mujer y madre de su hijo de su casa situada en Ocampo y José Hernández, en la localidad de Billinghurst, partido de San Martín.
En esas circunstancias, el subteniente, que presta servicio en el Grupo Apoyo Departamental (GAD) de ese partido y se encontraba vestido de civil, y su ex mujer fueron abordados por cinco adolescentes armados y con fines de robo, según declaró.
Según las fuentes, Pos denunció que les entregó su teléfono celular y, en un descuido de los asaltantes, extrajo su pistola reglamentaria calibre 9 milímetros y se identificó como policía.
Esa maniobra hizo retroceder a los adolescentes pero se cree que uno de ellos le apuntó con un arma y el policía comenzó a disparar hasta que vació su cargador de 16 proyectiles, dijeron los informantes.
Como consecuencia de los balazos, Correa murió de un tiro en la nuca, mientras que los sospechosos de 14 y 16 años resultaron heridos y quedaron aprehendidos en el Hospital Castex.
En la escena del crimen, los peritos de Gendarmería Nacional (GN) secuestraron 16 vainas servidas calibre 9 milímetros y no hallaron ningún rastro de que los asaltantes hayan disparado su arma, por lo que Pos fue apresado luego del hecho.


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