La defensora adjunta del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires, Graciela Muñiz, otorgó un plazo de 48 horas al gobierno porteño para que explique si el agente Alejandro Rivaud hacía tareas de inteligencia en la barrabrava de River Plate.
«Por la Ley de Seguridad Interior, la Policía Metropolitana no puede hacer tareas de inteligencia», recordó la Defensora Adjunta, quien se ha presentado en la justicia por causas asociadas a la violencia y a la reventa de entradas en espectáculos deportivos.
En diálogo con Radio Continental, Muñiz explicó que «a pesar de las numerosas denuncias» asociadas al tema del deporte «no imaginaba que alguien de la Fuerza Metropolitana podía estar infiltrado dentro de la barra de River».
«Estos personajes existen porque hay una dirigencia política que los sostienen, una dirigencia deportiva corrupta que los sostiene, y hay fuerzas de seguridad que hacen la vista gorda o están implicados en los negocios que realizan estos barras», señaló.
Respecto de la foja de servicio de Rivaud, la funcionaria señaló que ingresó a la Metropolitana a fines del 2012 proveniente de la Policía Federal, donde se desempeñaba en la hoy disuelta división de Seguridad en Espectáculos Deportivos.
Muñiz remitió al gobierno de la Ciudad un escrito en el que pide explicaciones respecto de la supuesta tarea de inteligencia que realizaba Rivaud y pidió que esa respuesta sea dentro de las próximas 48 horas para evaluar su presentación ante la justicia.