La Justicia ordenó el arresto de un hombre identificado como Cristian Méndez, de treinta años, sospechoso de haber iniciado el incendio que provocó la muerte de un matrimonio y seis chicos de entre 4 y 13 años, entre ellos su hijo, en Merlo.
El fuego comenzó a la 1 de ayer en una precaria vivienda de 7 por 4 metros ubicada en las calles Iwanowski y Larsen, del barrio El Pericón, en la localidad de Parque San Martín, y en base a los peritajes, los pesquisas creen que fue un múltiple homicidio.
Según el resultado de las autopsias, toda la familia murió por inhalación de monóxido de carbono y los primeros estudios establecieron que el fuego se inició en una cama cucheta, y como ésta estaba pegada al único ventiluz de la vivienda, sospechan que fue encendida desde afuera con un encendedor o fósforo.
Las víctimas son María Karina Flamenco (38); su actual pareja, Gastón Olivera (31) y seis hijos de la mujer: Ian (4), Nayla (5), Alejo (6), Sakira (10), Briana (11) y Yael (13), tres de los cuales también eran hijos de Olivera y el menor del sospechoso, identificado como Cristian Méndez (30), alias «Memo».
Anoche, el fiscal de Morón Sergio Dileo pidió la detención de Méndez al juzgado de Garantías local, en la causa caratulada «homicidio agravado por el medio empleado y por violencia de género».
El sospechoso tiene una denuncia por maltrato, radicada el 7 de marzo en la comisaría de la localidad de Parque San Martín, según confirmó el jefe de la Departamental Merlo, Hugo Santillán.
Una vecina, María, contó que empezó a escuchar gritos, y al ver por la ventana vio «llamas terribles» y que, junto a otras personas, llamaron a la Policía, a los bomberos y a la ambulancia.
Vecinos fueron a la casa, una construcción de ladrillo, techo de chapa y con un pequeño ventiluz, pero cuando trataron de abrir la puerta, advirtieron que estaba trabada desde adentro.
«Los vecinos rompieron las paredes para tratar de sacarlos porque estaban todos adentro. Estaba la puerta muy cerrada porque habían recibido amenazas, entonces quedaron atrapados porque había trabas, candados», afirmó María, quien dijo que la dueña de casa era hostigada por su ex pareja.
La mujer aseguró que pese a que los bomberos están a 10 cuadras, llegaron media hora después de iniciado el siniestro, por lo que la gente empezó a traer agua y a sacarla incluso de las zanjas para apagar el fuego y rescatar a las víctimas.
«Los vecinos ya habíamos sacado tres cuerpos, las criaturas tiradas en la vereda y todavía los bomberos no habían llegado. La Policía tuvo que llevar a los bomberos al hospital porque los iban a linchar», relató.