El locuaz Ibar Pérez Corradi quiere seguir hablando, pero la jueza Servini de Cubría ya se cansó y le pidió que presente escritos. En el último escrito dijo que se había enterado que la ex presidenta Cristina Kirchner había comprado una casa cerca de la quinta de Olivos para mantener reuniones. Dijo que su fuente era el vendedor de una concesionaria, donde fue a comprar un coche. Telón lento.