¿Qué pasa en el PAMI? Es lo que se preguntan los trabajadores de la obra social más grande del país, en estos días agitados, cuando se acaba de cumplir un nuevo aniversario de su creación, y las perspectivas parecen sombrías por anuncios de recortes y ajuste impulsados por el Gobierno.
En la noche del miércoles, el periodista del Grupo Clarín, Nicolás Wiñazki, habitual vocero del oficialismo, aseguró en el noticiero central de TN que hay un proyecto, elaborado por el ex ministro de Salud Jorge Lemus, para provocar un cambio drástico en el PAMI. El mismo miércoles, más temprano, hubo una jornada de luto en las distintas delegaciones de todo el país por los distintos recortes en las prestaciones que ya lleva adelante la gestión de Cambiemos.
El anuncio del vocero Wiñazki se produjo apenas horas después de la conferencia de prensa del presidente Macri, en la que anunció una aceleración del ajuste del gasto público, a tono con los requerimientos del Fondo Monetario Internacional. Como es habitual, Macri no dio precisiones sobre donde aplicará la tijera.
En ese contexto, provocó inquietud la contratación de un ex policía, con dudosos antecedentes, en la obra social de los jubilados que actualmente dirige Sergio Cassinotti, luego de haber pasado por el IOMA, la obra social de los estatales de la provincia de Buenos Aires.
Fuentes del organismo, informaron que según la resolución 302/18, el 1° de Abril se contrató en el PAMI «para desempeñar tareas en la Gerencia de Recursos Humanos al señor Daniel Alejo PAREDES, DNI 16.177.165. Mensualmente, al menos hasta el 31 de diciembre, percibirá 40.000 pesos mensuales».
¿Quién es Paredes? «De 55 años, proviene de Córdoba, donde es bien conocido por haber sido el único policía en el país a cargo de un Ministerio de Seguridad provincial, entre 2011 y 2013, período en el cual sus bienes y los de su familia se multiplicaron con creces, que se manifestó en la compra de bienes y la realización de viajes de lujo», dicen las fuentes.
Paredes fue jefe de la policía provincial y ministro de Seguridad en Córdoba, en tiempos de la gobernación de José Manuel de la Sota, hasta que renunció en en setiembre de 2013, luego del escándalo que se generó cuando fue acusado de encubrir el narcotráfico.
Paredes y el entonces jefe de la policía de Córdoba Ramón Frías, renunciaron a sus cargos, como consecuencia de lo que se conoció como narcoescándalo, una denuncia realizada por un colaborador de la policía provincial, Juan «el Francés» Viarnes, quien aseguró que la cúpula de la policía provincial cobraba coimas para permitir la actividad de los narcotraficantes. El caso terminó con varios policías condenados.
Dos meses después de la renuncia de la cúpula «al estallar la crisis policial de Córdoba, luego replicada en varias provincias, con mil comercios saqueados y dos muertes, muchos leyeron la influencia sobre la policía brava y bandas delincuenciales que aún poseía Paredes», dicen las fuentes.
Según una nota de la revista Veintitres, Paredes se formó al lado del represor de la dictadura militar Carlos “Tucán” Yanicelli, condenado en causas por delitos de lesa humanidad durante la dictadura. Yanicelli fue integrante del D2 de Informaciones de la Policía de Córdoba, «quien durante la democracia trepó en el escalafón policial hasta llegar a ser Jefe de Inteligencia Criminal en 1996, durante el gobierno de Ramón Mestre», según una nota del sitio EnRedacción.
Yanicelli fue condenado «en tres juicios por delitos de lesa humanidad realizados en Córdoba. Fue integrante del D2 hasta 1983 y ha sido uno de los hombres más influyentes de la Policía de Córdoba hasta hace no mucho tiempo. Por muchas razones, su estilo y su manera de trabajar, influyeron a las generaciones siguientes de policías. Su carrera durante los gobiernos radicales de Eduardo César Angeloz y Mestre fue impresionante: desde 1984 a 1990 fue segundo jefe y jefe la de Guardia de Infantería. A mediados de los ‘80 impulsó la creación de lo que hoy conocemos como Eter. Hasta 1997 fue jefe de Inteligencia Criminal, cuando fue denunciado por Luis Urquiza, que debió exiliarse en Dinamarca, en plena democracia por las amenazas a su vida y la de su familia. Ése episodio terminó con la carrera de “Tucán”», agrega el sitio.
Al lado de Yanicelli se formó Paredes, el nuevo empleado del PAMI. Según la nota de Veintitres, el vínculo entre los dos siempre fue muy estrecho y trascendió lo meramente profesional.
«El ministro Paredes nació el 3 de marzo de 1963. Siendo oficial principal, fue parte de la brigada de Yanicelli. Constituyeron un vínculo perdurable: el “Tucán” es padrino del hijo más grande de Paredes, que prefiere mostrar en público su costado cosmopolita. De la mano de la politóloga Alejandra Monteoliva, consultora de la gobernación cordobesa, forma parte de la Asociación Colombiana de Criminología. Según asegura en su currículum, hizo sus especializaciones con el Departamento de Estado de Estados Unidos, la Policía Nacional Francesa y la Policía de Israel, “promovido por la industria militar israelí”, según dice el CV, donde asegura que hizo un curso SWAT en Nueva Laredo, Texas, entre otros entrenamientos. Fue jefe del Equipo Táctico Especial Recomendado (E.T.E.R.) de 2001 a 2007 y jefe de la División Antisecuestro entre 2004 y 2006. Llegó a jefe de la policía cordobesa en 2007 hasta 2011, cuando De la Sota lo nombró ministro», consigna la nota.
«Además, Paredes está sospechado de ser titular de una agencia de seguridad privada con base en la propia policía provincial y de diversos negociados con proveedores de la fuerza», comentan quienes conocen la acualidad del ex policía y ex ministro.
Los trabajadores del PAMI dicen que «seería importante que el Director Casinotti nos explique a los trabajadores y afiliados de PAMI cuál será el aporte de este personaje en un instituto de servicios médicos y sociales para adultos mayores, que además tiene tercerizada la seguridad de sus edificios».