Menem es el eje de la feroz pelea entre la Corte y la Cámara Nacional Electoral
La intervención de un dirigente radical impidió que la pelea explote públicamente. Los reclamos de Alberto Dalla Via a Ricardo Lorenzetti.
Lorenzetti le dio la razón a Menem.
Está detonada la relación entre la Cámara Nacional Electoral y la Corte Suprema de Justicia, encabezada por Ricardo Lorenzetti.
El motivo de la pelea fue el fallo del Supremo que le permite a Carlos Menem ser candidato a senador en las elecciones legislativas del 22 de octubre, cuando el ex presidente busque una vez más el refugio de la Cámara alta, que lo salve de ir preso, aunque más no fuera en su propio domicilio.
El máximo tribunal ordenó que la Cámara vuelva a fallar sobre la impugnación a la candidatura a senador nacional de Carlos Menem por estar «mal argumentada» y por «arbitraria». Como se recuerda, finalmente los camaristas electorales fueron apartados y allí definieron jueces del fuero penal, quienes un mes atrás fallaron en favor de la candidatura de Menem, quien no se había podido presentar en las PASO.
Alberto Dalla Via, el juez electoral más influyente, tiene una relación pésima con Ricardo Lorenzetti. Suele decir que el supremo usa la justicia electoral para sus operaciones políticas y el fallo de la Corte sobre el tema Menem lo encontró directamente furibundo.
Dalla Vía estuvo muy cerca de hacer una conferencia de prensa para decir que Lorenzetti no defendía el proceso judicial de las elecciones y que había mucha injerencia del Ministerio de Interior y de Carlos Torello en el proceso electoral y concretamente en el Correo.
Una bomba si se considera cómo fue el recuento en las PASO bonaerenses, donde finalmente se impuso Cristina Fernández por unos 20 mil votos. Fue preciso una intervención del radical Ernesto Sanz, el ministro sin cartera, para desactivar esa bomba.
El otro que intenta mejorar esa relación por estos días es Martín Irúrzun, el cada vez más poderoso presidente de la Cámara Federal, que es radical igual que Dalla Vía y que tiene estrecha llegada a Lorenzetti.
Irurzun le dij a Dalla Via que la Cámara electoral había cometido el error de violar el precedente ‘Duarte’, del 5 de agosto de 2014 en el que la Corte dispuso que corresponde garantizar un recurso ordinario, accesible y eficaz a quienes habiendo sido absueltos en primera instancia son luego condenados por el tribunal revisor.
Un atajo muy conveniente: a Menem en el caso de las armas lo exoneró el tribunal oral pero lo declaró culpable la Cámara de Casación Penal. Por eso su defensa sostiene que el fallo no está firme, ya que no fue confirmada por una segunda instancia.
Si bien Menem no pudo el 13 de agosto participar oficialmente como precandidato, las boletas aparecieron con su nombre y rostro, debido a que la impugnación imposibilitó la impresión de nuevas papeletas y la Cámara Nacional Electoral permitió que se utilizarann las que ya habían sido aprobadas. Ese día, el Frente Justicialista se alzó con el 43,% de los votos.