«Mientras Lázaro no contradice a su jefa, el abogado de sus hijos, Santiago Viola, desbarata esa estrategia. Viola dijo lo obvio: que sobran indicios del vínculo entre Cristina Kirchner y Báez. ¿Habló en nombre de sus clientes? ¿O tiene sus propios intereses? La presencia de Viola es, acaso, el único detalle que vuelve verosímil la denuncia de la ex presidenta sobre una persecución política. Viola llegó a la causa Báez de la mano del fiscal Eduardo Miragaya, el gestor judicial de Silvia Majdalani, la subdirectora de la ex SIDE». Este párrafo de la columna de Carlos Pagni fue muy comentada hoy en los pasillos de Comodoro Py, sobretodo después de que el abogado de Báez, Maximiliano Rusconi, le pegó duro en una radio a Viola.