Rodríguez Larreta y Ocampo en un mejor momento.

Después de un pase de facturas que duró todo el fin de semana, en la noche del lunes el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, terminó por confirmar un rumor que había circulado durante las últimas horas: la renuncia de Martín Ocampo, ministro de Justicia y Seguridad de la ciudad de Buenos Aires tras el ataque al ómnibus de Boca , cuando llegaba el sábado 24 a la cancha de River para disputar la final de la Copa Libertadores.

Quién también pierde con la salida de Ocampo es justamente el presidente de Boca, Daniel Angelici, operador judicial del macrismo. Ocampo fue antes de ser ministro, legislador porteño y jefe de los fiscales de CABA, siempre bajo el apoyo y el amparo del dirigente boquense. De hecho anoche se especulaba que podría volver a la jefatura del Ministerio Público de la ciudad, cargo del que había pedido licencia para asumir como ministro. Ocampo es padrino de uno de los hijos de Angelici.

Ocampo se convirtió en ministro en diciembre del 2015 como parte del Gabinete que Rodríguez Larreta armó para iniciar su mandato al frente de la Ciudad. Para asumir esa función, dejó la presidencia del Ministerio Público Fiscal de la Ciudad, en la que desembarcó en marzo del 2014 al ser nombrado por el entonces jefe de Gobierno local Mauricio Macri, cargo del que pidió licencia.

La ministra del rubro de Nación, Patricia Bullrich y Ocampo habían pasado el fin de semana echándose la culpa por el fracaso del operativo. Bullricha había sido quien había respaldado la loca idea del presidente Macri de jugar los partidos finales de la Copa con público visitante. Desde la ciudad, con Ocampo, a la cabeza, fueron quienes primero se opusieron.

Tras el papelón en River, desde la Ciudad indicaban que los hechos ocurrieron en el Anillo 3 de seguridad, que correspondía a Prefectura, una fuerza que reporta a la ministra. Luego de una conversación con el presidente, Larreta salió a asumir toda la responsabilidad de lo ocurrido. Fue el comienzo del fin para Ocampo, quien había sido ratificado hacía menos de 24 horas por Larreta.

El jefe de Gobierno anunció anoche: «Acepté la renuncia de Ocampo. Le agradezco el compromiso de todos estos años” y agregó que «el máximo responsable político del Gobierno, Diego Santilli, va a asumir el cargo como ministro de Seguridad”.

Santilli, al igual que Ocampo, es hincha de River. Su padre fue presidente de la institución. Ahora deberá garantizar la seguridad en el próximo partido. Larreta indicó que las funciones que ocupaba van a quedar a cargo de otro funcionario, el secretario de Desarrollo Ciudadano, Matias López.

“Ratifico mi vocación de seguir a fondo en la lucha contra las barrabravas. Veo con buenos ojos que la Justicia esté investigando. La Justicia tiene que ir a fondo”, señaló Larreta, en referencia a la causa en la que se detuvo al jefe de la barra de River con 300 entradas para la final.