| Lo investigan en República Dominicana

La orden fue de Francisco: arrestan a un arzobispo acusado de pedofilia

El polaco Jozef Wesolowski fue acusado de pagar por tener sexo con menores mientras fue embajador del Vaticano en República Dominicana.

Weselowski fue expulsado de la Iglesia.

Weselowski fue expulsado de la Iglesia.

El Vaticano informó que dispuso el arresto de un ex arzobispo acusado de pagar por sexo con niños mientras era embajador papal en República Dominicana. El polaco Jozef Wesolowski se encuentra bajo arresto domiciliario en el Vaticano, dijo la Santa Sede en un comunicado.

El vocero vaticano, Federico Lombardi, confirmó la detención a través de un comunicado, en el que subraya que la medida se produce después de notificar al acusado la lista de delitos que se le imputan en el proceso penal por sus presuntos «graves hechos de abuso a menores en la República Dominicana».

Wesolowski, de 66 años, está acusado de abusar de menores de edad durante su estancia en la República Dominicana, donde fue nuncio apostólico.

Por esta razón fue destituido de su cargo a finales de agosto de 2013 y el pasado junio expulsado del sacerdocio, tras un proceso canónico instruido por la Congregación de la Doctrina de la Fe, el ex Santo Oficio.

Wesolowski es la figura eclesiástica más destacada en ser arrestado desde Paolo Gabriele, un ex mayordomo papal condenado en 2012 por robar y filtrar documentos privados del ex Papa Benedicto XVI.

A diferencia de Gabriele, Wesolowski no permanece detenido en la prisión del Vaticano -un par de habitaciones junto a una corte-, sino que fue puesto bajo arresto domiciliario en un apartamento en la Santa Sede por razones médicas.

Wesolowski fue apartado del sacerdocio por un tribunal del Vaticano este año y espera por un juicio bajo cargos criminales. El religioso vivía libremente en Roma y víctimas de abuso sexual habían pedido su arresto, expresando su temor a que pudiera huir.

El Vaticano dijo que el arresto reflejaba los deseos del Papa Francisco «de que un caso tan grave y delicado fuera abordado sin demoras, con el rigor justo y necesario».

 


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