Por Rafael Saralegui
El jury que se le sigue al suspendido fiscal José María Campagnoli sufrió hoy una imprevista postergación hasta la semana próxima, por una descompensación que sufrió una de las integrantes del tribunal.
Hoy debían realizarse los alegatos y el acusado tenía la posibilidad de expresar las últimas palabras antes del veredicto. Y se especulaba con que el fallo del tribunal de enjuiciamiento podría conocerse mañana, quizás a la misma hora en que la selección Argentina jugará con Nigeria, a las 13, para definir si termina en el primer puesto del Grupo F de la Copa del Mundo, que se disputa en Brasil.
El presidente del tribunal de enjuiciamiento, sólo se tomó un par de segundos esta mañana para anunciar que la audiencia se postergaba hasta el próximo 30 de junio debido a que la defensora María Cristina Martínez Córdoba sufrió un malestar durante el fin de semana.
Campagnoli comenzó a ser juzgado la semana pasada tras el jury que se inició por pedido de su jefa, Alejandra Gils Carbó. El proceso se desarrolló durante la semana pasada y mañana comenzará los alegatos de la defensa y los fiscales acusadores.
En los alegatos que se iban a realizar hoy los fiscales Marcelo García Berro y Adolfo Villate, quienes pensaban pedir la remoción de Campagnoli porque para ellos durante el «jury» se demostró el «mal desempeño» del suspendido funcionario.Campagnoli fue acusado de “abuso de autoridadad» por haber modificado el objeto procesal de una causa, en la que el financista Federico Elaskar pasó de imputado por supuesta administración fraudulenta de una financiera perteneciente a Lázaro Báez a presunta víctima de una extorsión por parte del empresario.
Los fiscales consideran que durante el jury se probó que Campagnoli no sólo no investigó la supuesta extorsión a Elaskar, sino que, siendo incompetente en razón de la materia, avanzó en una pesquisa por «lavado de dinero». Otro de los cargos contra Campagnoli es la divulgación de datos y documentación reservada que apareció en medios de comunicación, en tanto que, según el pedido de remoción de Gils Carbó, le negaba a los imputados el acceso a las actuaciones.
El jury es presidido por Daniel Adler, designado por la Procuración, y lo integran Ernesto Kreplak (designado por el Poder Ejecutivo Nacional), Rodolfo Ojea Quintana (por el Senado Nacional), Juan Octavio Gauna (por la Corte Suprema de Justicia), Javier Panero y Adriana Donato (Federación Argentina de Colegios de Abogados y Colegio Público de Abogados de la Capital Federal, respectivamente), y María Córdoba, por la Defensoría General de la Nación.
En diciembre, cuando se inició el proceso contra Campagnoli fue suspendido de su cargo por una decisión tomada por mayoría: fue por cuatro votos contra tres. Quienes votaron por la suspensión fueron Adler, Kreplak, Ojea Quintana y Córdoba. La defensa de Campagnoli cree que su suerte depende de poder cambiar alguno de esos votos.
Consideran que Adler, Kreplak y Ojea Quintana no cambiarán de parecer y que votarán por su destitución. Del mismo modo, están convencidos de que los dos abogados y Gauna votarán en su favor. Por eso están convencidos de que el voto clave es el Córdoba, que participa del jury en representación de los defensores oficiales. Ella fue quien tuvo más dudas en diciembre a la hora de votar la suspensión.
La defensa de Campagnoli está convencida de que durante el jury se probó que los cargos que se le hicieron al fiscal fueron endebles y no pudieron ser demostrados, por eso aspiran a poder convencer a Córdoba de que cambie su voto de diciembre.
La novedad de la descompensación que sufrió Córdoba genera enigmas sobre su posición en el jury. Luego de la suspensión de la audiencia de hoy, fuentes de la Procuración dijeron a CyR que la defensora no está acostumbrada a momentos de tensión como los que está viviendo.
Dijeron que luego de la columna que Jorge Lanata -declaró como testigo en el jury y defendió la actuación de Campagnoli- escribió el sábado en Clarín comenzó a ser hostigada por diversos medios y que eso provocó su descompensación.