Por Rodolfo Palacios. La modelo y conductora Jésica Cirio le ganó un juicio a Google porque descubrió que su nombre y su imagen figuraban en páginas pornográficas y de avisos de prostitución vip. Será indemnizada con 700 mil pesos. Más allá de su victoria judicial, si se escriben su nombre y la palabra porno en ese buscador, aún aparece vinculada a videos prohibidos de sexo. “Jésica Cirio desnuda teniendo sexo como nunca la viste”, anuncia una de las páginas. Y al escribir su nombre y apellido en Google, aparece este título: “Fotos prohibidas de Jésica Cirio”. Al parecer, hasta las 15 del jueves 24 no había sido acatado el fallo que prohíbe vincular a Cirio con páginas pornos. “Evidentemente tiene validez ese axioma según el cual todo lo que sube a Internet nunca se baja”, dice Ricardo Sáenz, Fiscal de la Cámara de Apelaciones en lo Criminal y especialista en delitos informáticos. El de Cirio no es el único caso. La vedette Evangelina Carrozo también le ganó un juicio al famoso buscador por un valor de 85 mil pesos. Pero todavía su nombre aparece en algunas páginas que anuncian videos eróticos y porno de la entrerriana que se hizo famosa por mostrar un cartel con poca ropa en el que protestaba contra las papeleras, ante la miradas atónitas de los presidentes que participaban de la IV Cumbre
Unión Europea-América Latina y el Caribe, celebrada en Viena en 2006. Lo mismo ocurre con las fotos de la muerte de la modelo Jazmín De Grazia. Pese a que un fallo de la Sala Segunda de la Cámara en lo Civil y Comercial Federal prohíbe a los buscadores de Internet la difusión de esas imágenes publicadas por el diario Crónica, en Google puede encontrarse ese material que sólo alimenta el morbo y el dolor de los familiares de la ex panelista de Duro de Domar. Para los camaristas Ricardo Recondo y Graciela Medina, la publicación de las fotos fue un hecho grave. “Es, también, una conducta carente de toda ética. Pero ello no puede ser el motivo para limitar el acceso a cualquier información sobre su persona“. En la actualidad, si se escribe en Google “Jazmín De Grazia”, las imágenes y noticias sobre su muerte a los 27 años ocupan casi más espacio que la información y las fotos relacionadas con su carrera de modelo. Los camaristas citaron la ley 26.032, que dispone que la búsqueda, recepción y difusión de información e ideas de toda índole, a través del servicio de Internet, está amparada por la garantía constitucional de la libertad de expresión. “Hasta que no haya una regulación al respecto, será difícil para la justicia civil resolver este tipo de casos porque el Código Civil no contempla este tipo de delito informático. Quizá se podrían adoptar criterios similares a los de Estados Unidos o a las directivas de la Unión Europea. Una de las discusiones es si el buscador de Internet, en este caso el intermediario, es responsable aunque el material lo haya subido una página. O si no puede eludir el hecho de que facilita la búsqueda de ese material ilícito. Ellos dicen que no tienen la capacidad técnica de controlar los contenidos, yo creo que sí. De hecho Youtube no tiene pornografía infantil”, opina Sáenz. El abogado Gustavo Tanús, que representa a varias famosas damnificadas y es experto en derecho informático y protección de datos personales, dijo que en primer lugar se manda una carta documento al buscador y al blog o sitio que exhibe las fotos o la identidad de las famosas. «Muchas veces es que el blog borra la información, ante el pedido del afectado, y Google o Yahoo la siguen ofreciendo en las búsquedas. El próximo paso, si es que no responden, es pedir una medida cautelar, el procedimiento más rápido para que cese el daño que causan”. Para Sáenz, los buscadores deben poder controlar el contenido. En su rol de fiscal acusó a los encargados de Cuevana de violar los derechos de autor. “Ellos decían que no controlaban los contenidos, pero por otro lado tenían catálogos de las series y películas. ¿Quién hacía entonces esos catálogos? Los hacían ellos”, dijo Sáenz. Otra modelo que pudo vencer a Google es Bárbara Lorenzo, que participó en una edición del desfile de la mejor cola Reef y cuya imagen aparecía en un sitio con contenido erótico. El juez Carlos Gorri ordenó al buscador pagarle 35 mil pesos y sacar de la página esa foto. Los abogados de la empresa norteamericana deslindaron responsabilidades y respondieron: “Algunas de las imágenes de la actora que corresponden a producciones fotográficas consentidas por ésta y aún en caso de vulneración de la intimidad, los responsables de los hechos son terceros ajenos por los que no debe responder”. Hay otras famosas que ganaron juicios contra los buscadores, entre ellas Pamela David, Nicole Neumann, Paola Krum y Julieta Prandi. Romina Gaetani, Silvina Luna, Soledad Fandiño, Eliana Guercio, Isabel Macedo, María Eugenia Tobal, Karina Mazzoco, Karina Jelinek, Sofía Zamolo, Ximena Capristo y Sabrina Rojas también iniciaron causas a través de sus abogados ante la Justicia civil. Los abogados de Google en la Argentina, María Baudino y Juan Pablo Bonfico, le dijeron al diario Perfil que “es imposible controlar los contenidos de todas las páginas”. Y denunciaron que existe “una industria del juicio montada en contra de la empresa”. Argumentaron que en Inglaterra, por ejemplo, un tribunal concluyó que los buscadores no pueden ser responsabilizados por lo que publican los sitios de terceros.