Los Pumas se disculparon públicamente hoy por el «decepcionante» homenaje a Diego Maradona en el último partido ante los All Blacks, en simultáneo a un escándalo desatado en las redes sociales por viejos mensajes xenófobos y racistas de su capitán, Pablo Matera, y otros tres integrantes del plantel.
Matera le puso voz a un descargo grabado junto a toda la delegación del seleccionado argentino que participa del Tres Naciones en Australia y minutos después de su publicación debió cerrar su perfil de Twitter por las interacciones negativas de posteos discriminatorios descubiertos en su cuenta por distintos usuarios.
Mensajes igualmente repudiables fueron recuperados de los perfiles de Guido Petti, Mayco Vivas y Santiago Socino, otros tres miembros del plantel argentino.
Luego de las críticas recibidas en los últimos días por el insignificante homenaje a Maradona el sábado en la previa de la derrota ante los All Blacks (38-0), Los Pumas publicaron un video con un pedido de disculpas por la «decepción» que causó «en mucha gente» lo sucedido.
Capitán racista
Sin embargo, el mensaje no tuvo el efecto deseado ya que luego Matera se convirtió en tendencia en Twitter por mensajes xenófobos y racistas que motivaron el posterior cierre de su cuenta.
Algo similar sucedió con Socino, Vivas y Petti, a quienes también le encontraron polémicos tweets. En todos los casos, el contenido estigmatiza por nacionalidad y raza, aunque el primero también posteó mensajes agraviantes contra la titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini.
«Voy a rapar a la mucama, la puta madre», escribió Matera en su cuenta @PablitoMatera en marzo de 2012, mientras que en abril apuntó su odio hacia la comunidad boliviana.
«Sentarse en el asiento que apunta al revez (sic) en el colectivo es lo más parecido a festejar tu cumpleaños en Bolivia con desconocidos», puso en uno de sus mensajes, mientras que luego insistió con otro supuesto chiste: «Hombre boliviano porta mp3 cor auriculares de ipod. Prueba suficiente para encarcelarlo por robo».
Homenaje negro
La historia de esta polémica comenzó en las primeras horas del sábado en la previa del partido que Los Pumas debían afrontar ante los All Blacks de Nueva Zelanda por el Tres Naciones, en la ciudad australiana de Newcastle.
Luego del homenaje del seleccionado de básquetbol, era el turno de Los Pumas para recordar a Diego en el marco de una competencia oficial tras el fallecimiento que se produjo el miércoles al mediodía por un paro cardiorrespiratorio.
Según explicó Matera en el video publicado en la cuenta oficial de Los Pumas, el equipo le pidió a la organización del torneo que pasen canciones relacionadas a Maradona durante la entrada en calor.
A esto le sumaron una imperceptible cinta negra en el brazo de toda la delegación encabezada por Mario Ledesma.
«Sabemos que el homenaje causó dolor y decepción en mucha gente, pero de ninguna manera fue nuestra intención. Diego fue una persona sumamente importante para nosotros, siempre nos apoyó y nos acompañó», remarcó Matera, quien fue el único orador del video y estuvo rodeado por el resto del plantel de Los Pumas.
El Haka
Todos estos gestos, no obstante, fueron opacados por los All Blacks, que en la previa del tradicional Haka ofrendaron una camiseta negra con el 10 y el Maradona estampado en la espalda.
El gesto que encabezó el capitán de Nueva Zelanda, Sam Cane, quien puso la camiseta sobre el césped ante la mirada incrédula de los argentinos, dio vuelta el mundo y dejó en evidencia a Los Pumas.
Los mensajes con cuestionamientos a los «valores del rugby» se multiplicaron en las redes sociales y ante el crecimiento de la polémica, Matera cerró definitivamente su cuenta de Twitter.
Pero antes se pudo ver que después de disputar el Mundial juvenil de Sudáfrica, donde fue capitán de Los Pumitas que finalizaron cuartos en el torneo, Matera no pudo evitar su evidente racismo, ni siquiera en el país de Nelson Mandela: «Por fin me voy de este país lleno de negros», escribió en su cuenta oficial, ahora cerrada.
Unos meses antes, había intentado hacerse el gracioso, pero expuso su odio de clase. «El (colectivo) 57 se parece a una sandía. Colorado, lleno de puntitos negros».