Una buena noticia para el ámbito de la seguridad y las políticas públicas vinculadas con la represión de los delitos y el combate de las organizaciones criminales. Un informe de la Unidad Fiscal Especializada en Secuestros Extorsivos (UFESE), a cargo del fiscal federal Santiago Marquevich, determinó que los secuestros extorsivos disminuyeron en 2017, al seguir una tendencia a la baja que se había registrado en los dos años anteriores.
Se trata de una notable disminición de un 37% en dos años, lo que demuestra la validez de la creación de fiscalías especializadas para determinados delitos complejos, porque permite cruzar variables para establecer patrones y dar con las bandas que se dedican a ese rubro. La baja respecto del 2016 fue de un 18,5%.
La UFESE presentó el último informe parcial –correspondiente al mes de diciembre de 2017- del que se desprende que se registraron 13 secuestros extorsivos durante ese periodo, en todo el país. Al tratarse de un delio federal, las cifras son registradas por ese organismo especializado en esa problemática delictiva.
El informe complementa los presentados en meses anteriores y el análisis global de los datos permiten concluir que, durante el año 2017, se registraron 185 secuestros extorsivos en todo el país, según consigna la página Fiscales, que depende de la Procuración General de la Nación.
La comparación de los datos relevados durante el año 2017, con los de los dos periodos anteriores, permite concluir que la tendencia a este tipo de ilícitos ha disminuido desde que se creó la UFESE, en el mes de julio de 2016. En tal sentido, en el informe del año 2016 se consignaron 227 casos, mientras que el año anterior se registraron 294 secuestros extorsivos.
Durante el 2017, los secuestros se concentraron sobre todo en el sur del Gran Buenos Aires. Tres de ellos tuvieron lugar en jurisdicción de la Fiscalía Federal de Campana, en veinticuatro intervino la Fiscalía Federal de Quilmes, 40 fueron instruidos por las Fiscalías Federales de Lomas de Zamora y 41 por las de Fiscalías Federales de Morón. Asimismo, las Fiscalías Federales de San Isidro investigaron 8 secuestros extorsivos, mientras que las de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires intervinieron en 37 hechos.
El informe también consigna que ocho secuestros extorsivos tuvieron lugar en jurisdicción de las Fiscalías Federales de San Martín, 6 fueron investigados por la Fiscalía Federal de Tres de Febrero y doce fueron pesquisados por la Fiscalía Federal de Hurlingham. Asimismo, en el interior del país se registraron seis secuestros: uno en jurisdicción de la Fiscalía de Dolores, otro en la de Azul, dos fueron investigados por las fiscalías federales de Córdoba e igual cifra por las Fiscalías Federales de Rosario.
De los 185 hechos relevados por la UFESE –en base a la información remitida por las distintas fiscalías que investigaron los hechos- la mayoría ocurrieron en la franja horaria que va desde las 18 horas hasta la medianoche, y le sigue el periodo de tiempo que va desde las 0 horas hasta las 6 de la mañana. Además, del análisis de los datos surge que la mayoría de los secuestros tuvieron como víctima a una sola persona, por lo general, de sexo masculino.
Por otra parte, el modo en que las víctimas recobraron su libertad, varía según el mes: en enero, abril y noviembre la mayoría de las víctimas fue liberada sin que se pagase rescate, mientras que los meses restantes, la tendencia se revirtió.
De todos modos, la dismunición de los secuestros extorsivos, en los que una persona es retenida hasta que un tercero paga un rescate, no significa que haya disminuido en el mismo sentido otros tipos de secuestros, como los exprés, en los que la víctima es retenida en un vehículo o los virtuales, en los que no hay víctimas retenidas.
“El secuestro es un problema creciente y de ámbito mundial. Se calcula que más de 10.000 personas son secuestradas cada año”, según un informe de Naciones Unidas.