Por Rafael Saralegui.
Un ingeniero informático argentino de 36 años, detenido desde mayo de 2012 en España, acusado de integrar una red de espionaje y robo de datos, aparece ahora vinculado con el caso de corrupción más grave que le pisa los talones a la corona española. Matías Bevilaqcua también está imputado de haber espiado a una de las hermanas de la princesa de Asturias Letizia Ortíz, de haber trabajado para el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) de España y de haber colaborado con el gobierno del fallecido presidente de Venezuela Hugo Chávez en la instalación de laboratorios informáticos, supuestamente utilizados para perseguir a opositores políticos.
El diario madrileño El Mundo informó esta semana que la policía encontró en archivos de Bevilacqua unos 30 mil correos electrónicos que están vinculados con la trama de lo que se ha llamado el caso Nóos, el desvío de millones de euros de fondos públicos por el que está siendo investigado Iñaki Urdangarin, esposo de la Infanta Cristina y yerno del rey Juan Carlos.
Bevilacqua es el el titular de la empresa CF Labs, tenía su domicilio en Barcelona, y en su declaración ante el juez José Castro, que investiga el caso Nóos, dijo que había sido contratado por el abogado de Urdangarin, Mario Pascual Vives, para poner en orden los correos electrónicos vinculados con el caso y que por esos servicios, supuestamente legales, había cobrado 7.000 euros. Sin embargo, los expertos informáticos de la policía española encontraron en las computadoras de Bevilacqua 30 mil correos electrónicos correspondientes al estudio de abogados Medina Tejeiro.
En ese bufete de letrados trabajan los cuñados de Diego Torres, el ex socio de Urdangarin, quien llegó a decir que la trama de desvío de fondos y corrupción llegaba a involucrar a la corona española. Los abogados Medina Tejeiro se encargaban de llevar la contabilidad y la administración del Instituto Nóos, propiedad de Urdangarin y Torres, y la pantalla que se utilizó para desviar millones de euros provenientes de fondos públicos y que fueron derivados a paraísos fiscales.
La periodista Ana Paulet, del sitio elcomunisa.net, sostuvo que los correos “habrían sido hackeados poco después de que Torres comenzara a airear correos comprometedores de la Casa Real, como estrategia de defensa. El abogado de Urdangarin Pascual Vives le habria pagado 7.000 euros por el trabajo. Matías Bevilacqua durante su interrogatorio, aseguró haber sido contratado por el entorno de Urdangarin para un trabajo absolutamente legal: organizar el sumario, expurgar los mails y establecer relaciones entre personas e informaciones de personas, testigos e imputados del ‘caso Palma Arena’”.
No es la primera vez que Matías Bevilacqua Trabado captura la atención de los medios españoles. Saltó a las páginas de los diarios cuando fue arrestado durante los operativos llevados a cabo el 2 de mayo de 2012 durante llamada Operación Pituisa, en la que fueron detenidas 150 personas que habían organizado una red dedicada a la “revelación de secretos, cohecho y blanqueo de capitales ”. En esa investigación se lo imputa a Bevilacqua de haber espiado a Telma Ortíz, hermana de doña Letzia, esposa del príncipe Felipe de Borbón, heredero de la corona, y hermano de la Infanta Cristina, cuyo esposo Urdangarin ha hecho todos los esfuerzos posibles en sus declaraciones judiciales para despegarla del caso. En la caja de fuerte de Bevilacqua s encontraron 150 mil euros y órdenes de pago realizadas por la CNI. El organismo admitió que había contratado al ingeniero tiempo atrás, pero sostuvo que al momento de su arresto ya no trabajaba para ellos.
Los servicios de Bevilacqua y de su empresa eran muy requeridos. Depués de haber sido arrestado habría colaborado en la instalación del Centro de Cyber Defensa Nacional de España, una organización oficial destinada a proteger al Estado español del espionaje informático. El ingeniero Bevilacqua dijo haber colaborado asiduamente con el CNI, el servicio de inteligencia español.
En su perfil en la red de contactos profesionales Linkedin, Bevilacqua dice que es Ingeniero Informático por la Universidad Politécnica de Catalunya UPC y que “inició su trayectoria en el sector de la seguridad informática”. Y en sus antecedentes enumera que “ha sido el responsable del diseño e implementación de múltiples laboratorios forenses, desde pequeños equipos para el sector privado hasta laboratorios gubernamentales con cobertura nacional. Ha intervenido en calidad de experto en todo tipo de situaciones, peritajes, arbitrajes, perito judicial por insaculación o asesor gubernamental entre otros. Forma parte del High Level Experts Group como consejero estratégico en Cyberseguridad para la Secretaría General de la ITU y los estados miembros de la UE. En el plano de la formación, ha formado a Jueces, fiscales, abogados y técnicos tanto en España como en el extranjero. Actualmente ocupa el cargo de Director Tecnológico en CFLabs”.
Ese era el puesto que tenía cuando fue detenido en mayo de 2012. En esa colaboración que menciona con laboratorios gubernamentales, es que aparece su eventual trabajo para el gobierno del fallecido presidente venezolano Hugo Chávez. Según el diario monárquico ABC “el hacker imputado en la Operación Pitiusa ha puesto en marcha un proyecto de seguridad informática para el ejecutivo de Hugo Chávez. Al ser consultado sobre la naturaleza de los trabajos que realizó para Venezuela, Bevilacqua respondió lacónicamente: “Nunca hablamos sobre nuestros clientes”.