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Cabral era subrogante en Casación.
Fue un fin de semana complejo para la pelea del juez Luis María Cabral por retener su cargo en la Cámara de Casación Penal, del que fue removido por el Consejo de la Magistratura.
Ya hay varios integrantes de la Asociación de Magistrados que están pidiendo cancelar la marcha organizada para el martes 7 de junio frente al Palacio de Tribunales. El rechazó del pedido de amparo que sufrió Cabral el viernes a manos del juez Furnari lo lleva a replantear sus prioridades.
Un rato antes de conocer la decisión del juez en lo contencioso administrativo Esteban Furnari, Cabral tomaba café frente al Palacio en compañía del ex juez Juan José Galeano que fue destituido por su accionar en el caso AMIA y que le ha encontrado el gustito a ir por los canales de televisión como una defensa previa al juicio que afrontará desde la primera semana de agosto por supusto encubrimiento en la investigación del atentado.
Todo cambia rápido. Cabral antes era escoltado por un nutrido grupo de jueces, secretarios y abogados de la matrícula que celebraban sus ocurrencias en un café de la calle Tucumán. Ahora en este momento de debilidad la gente corriente de la calle lo saluda pero toma café en soledad. Algunas costumbres no cambian: sigue dejando poca propina.
A Cabral ahora le recomiendan directamente ir con un recurso extraordinario a la Corte y forzar una definición de Ricardo Lorenzetti. Va a ser muy difícil porque Elena Highton de Nolasco no votará para reponerlo. Y Fayt podría no querer pronunciarse. Estaría faltando un voto.
Por eso Lorenzetti ya le pidió a su asesora María Bourdin que modere la promoción de la marcha que hace desde el CIJ. «El martes tenemos 60 personas con toda la furia», dice Lorenzetti entre preocupado y divertido.
La Corte vuelve a estar movilizada por artículos mediáticos, el más reciente titulado «Los restos de la Corte», que publicó la revista online Anfibia y donde se hace una cruda descripción de la vida en el máximo tribunal con sus logros y miserias. A Lorenzetti lo ha alterado un poco tanto nivel de detalle mientras que Highton está encantada con lo allí descripto.
