La requisa a menores detenidos.

El gobernador San Luis, Claudio Poggi, ordenó la renuncia del titular del Servicio Penitenciario, Inocencio Carpio, luego de que ayer se publicaron en medios provinciales fotos de una requisa a delincuentes menores de edad, en las que los detenidos aparecían desnudos, en posición fetal, con la frente contra el piso, mientas agentes con perros inspeccionaban su ropa y sus pertenencias.

Las fotos fueron tomadas durante una inspección que se realizó en abril de 2013, en un pabellón de menores. El gobierno provincial informó que Poggi había pedido y aceptado la renuncia del jefe del Servicio Penitenciario, Inocencio Carpio.

El ministro de Seguridad, Martín Olivero, dijo ayer que se trató de un acontecimiento «aislado” y manifestó el repudio de todo el Gobierno. «Es raro que aparezca una foto recién 14 meses después. Igual repudiamos el hecho», agregó el funcionario.

La Comisión de Derechos Humanos del Gobierno provincial cuestionó los maltratos. “En el día de hoy se han hecho públicas fotografías que revelan que en el Servicio Penitenciario Provincial no se ha logrado desterrar, de modo definitivo, esas prácticas aberrantes cometidas contra personas indefensas y sometidas a tratos crueles e inhumanos», se indicó en un comunicado.

Se informó que la Comisión trabajó durante la mañana de ayer en el penal  «contactando y dialogando con todos los segmentos del sistema, y ha constatado que los autores de los tormentos fueron separados de sus cargos, por conductas que remiten a épocas que todos pensamos desterradas de la vida democrática y republicana”.

Olivero precisó que las imágenes se tomaron el 22 de abril de 2013 a las 12:24, en el pabellón de menores adultos (internos que tienen entre 18 y 21 años).

«Se me cae la cara de vergüenza porque evidentemente son prácticas que no he podido cambiar y por eso ordené de inmediato una investigación de los hechos y la separación de sus cargos del personal que aparece en las fotografías», afirmó Carpio, luego de renunciar a su cargo.