El Gobierno sostiene que fue un sabotaje.

El conductor y el ayudante del tren que en la noche del domingo chocaron a una locomotora en la estación de Temperley, fueron detenidos hoy y mañana serán indagados por el juez federal de Lomas de Zamora, Alberto Patricio Santamarina.

Diego Sánchez y Nicolás Navarro, conductor y ayudante, respectivamente, de la formación de la línea Roca que embistió a una locomotora que realizaba maniobras cerca de la estación de Temperley quedaron detenidos por orden del juez federal.

“Ambos imputados deberán declarar en el día mañana ante el juez de Lomas de Zamora, Alberto Santamarina. De acuerdo con el pedido formulado por la Fiscalía, Sánchez y Navarro serán indagados por los delitos de estrago doloso -previsto por el artículo 191, inciso 3° del Código Penal- y de daño agravado -artículo 184 inciso 5° del Código Penal-”, según se informó en la página web de la Procuración.

El delito de estrago doloso castiga “con reclusión o prisión de tres a diez años, si a consecuencia del accidente, resultare lesionada alguna persona”. Castiga a las personas que emplean cualquier medio para entorpecer o detener la marcha de un tren y está incluido en el capítulo que castiga los delitos contra los medios de transporte y de comunicación.

A las 21.30 del domingo un tren diesel que estaba parado en la estación de Temperley inició su marcha y a pesar de que el controlador del tránsito le ordenó que se detuviera siguió su marcha hasta embestir a una máquina que estaba en la misma vía. Según el ministro de Interior, Florencio Randazzo, se trató de una maniobra adrede para perjudicar al Gobierno.

Según se informó oficialmente, “a lo largo del día, la Fiscalía requirió una nueva serie de medidas de prueba entre las que se incluye el relevamiento de información referida al estado de los trenes, sus certificados de habilitación y sus manuales de funcionamiento. También, se solicitó la declaración de testigos que se encontraban en la estación de Temperley al momento del accidente”.