El senador nacional y ex gobernador peronista de Tucumán José Alperovich presentó hoy un pedido de licencia en su banca, luego de haber sido denunciado penalmente por el delito de abuso sexual por una ex colaboradora y familiar suya, quien este lunes ratificó la denuncia ante la justicia provincial.
La carta con el pedido de licencia fue enviada en la noche del lunes a la oficina de la presidenta del Senado, Gabriela Michetti, pero aún no había sido ingresada formalmente a la Cámara alta, dijeron los portavoces.
El viernes pasado se hizo pública una denuncia penal contra el senador y tres veces gobernador de Tucumán por presunta violación. La acusadora es una joven de 29 años pariente de Alperovich que, además, trabaja en las oficinas de la otra senadora peronista por Tucumán, Beatriz Mirkin.
A partir de su denuncia fue licenciada por las autoridades del Senado y cuando se reincorpore será destinada a otra repartición de la Cámara, según anunció a la prensa Federico Pinedo.
La mujer ratificó hoy la denuncia ante la fiscal tucumana María del Carmen Reuter y queda pendiente ese trámite en la Justicia federal porteña, donde también se radicó una presentación contra el senador.
Ratifican la denuncia
Milagro Mariona, quien actúa como vocera de la mujer, dijo que «fuimos con mucha ansiedad de saber cómo iba a ser el encuentro con la fiscal, pero ella se sintió muy bien y se cumplieron todos los procedimientos para garantizar el buen trato y la no revictimización».
Añadió que «estamos en un momento donde se tiene en cuenta la voz de la víctima y ahora hay que confiar». Y advirtió que «nos genera temor la decisión de la política porque la Justicia es lenta y si no se toman las medidas pertinentes en el Senado esto puede quedar impune».
En tanto, el abogado de la sobrina del ex gobernador Alperovich anunció hoy que cuando corresponda en el trámite del proceso pedirá «la pena máxima de 15 años» de prisión.
«A fin de dedicar mi esfuerzo y mi tiempo a desbaratar la infamia, aclarar la verdad, y reparar mi honor, le pido expresamente que me confiera licencia en mi honorable cargo», dice el comunicado difundido por el senador peronista.
El pedido de licencia de Alperovich, de todos modos, debe ser autorizado por el pleno de la Cámara. La próxima reunión parlamentaria se hará este miércoles y servirá para tomar juramento a los legisladores que se incorporarán al Senado desde el 10 de diciembre.
Alperovich dice ser víctima
En la misiva, Alperovich se consideró «víctima de denuncias promovidas» en su contra y aseguró que «la imputación es absolutamente falsa» lo que, resaltó, demostrará «a la corta o a la larga ante la Justicia».
Con la salida del legislador tucumano, quien unos días antes de la denuncia había anunciado su integración al unificado bloque Justicialista a partir del 10 de diciembre, la futura bancada oficialista perderá un parlamentario durante el tiempo que dure la licencia.
Además: Una sobrina del senador Alperovich lo denunció por abuso sexual
En principio, el peronismo quedaría con 38 senadores, apenas uno por encima del quórum propio.
El viernes, una sobrina segunda del senador nacional presentó una denuncia por abuso sexual en contra del ex gobernador de Tucumán en los tribunales locales y en la Unidad Fiscal Especializada de Violencia contra las Mujeres (UFEM), en Buenos Aires.
La joven, de 29 años, a través de una carta abierta, publicada por el diario La Gaceta, de Tucumán, cuenta los abusos que según ella sufrió de parte de Alperovich.
Denuncia de violación
Mariela Labozzetta, titular de la UFEM, confirmó que la denuncia también fue presentada allí, ya que los abusos ocurrieron en Tucumán y en la ciudad de Buenos Aires, y se espera que un juez ordene las medidas de protección solicitadas por la joven.
La denunciante dijo en la carta que «no escribo para convencer a nadie de nada. Estoy aquí contra la opresión del silencio y por la necesidad de recuperar mi vida, de sanar llamando a las cosas como son, sin suavizarlas ni teñirlas, poniéndole al monstruo nombre y apellido. Cuando no le ponés nombre, no existe».
«El mío se llama José Jorge Alperovich, mi tío segundo y jefe, por quien fui violentada sexual, física y psicológicamente desde diciembre del 2017 hasta mayo de 2019. Durante un año y medio sufrí violaciones a mi integridad física y sexual. El avasallamiento fue demoledor. Tanto que ni siquiera pude ponerlo en palabras. Él oscilaba libre y cómodamente en los tres escenarios ante los que me posicionaba: el familiar, el laboral y el del horror de la intimidad que me forzaba a vivir con él», relata.
Miembros del Frente de Todos, como los diputados Felipe Solá y Victoria Donda, entre otros, pidieron a Alperovich que se tome licencia mientras avanza la denuncia. También se hicieron eco del pedido el legislador Leonardo Grosso y la electa diputada por el Frente Renovador Malena Galmarini.