El presidente de Boca Juniors, Daniel Angelici, y el camarista federal Eduardo Freiler fueron denunciados ayer penalmente en la Justicia federal luego de una nota publicada hoy en la que se sostiene que hubo un pago de sobornos.
La nota publicada en el diario La Nación refiere un supuesto caso de coimas que el dirigente deportivo le habría pagado a ese juez de la Sala I de la Cámara Federal «para favorecer a (Mauricio) Macri en la causa de las escuchas ilegales».
La denuncia fue radicada por el diputado nacional Julio Rafo, que integraba el bloque del disuelto UNEN y ahora adscribe al grupo parlamentario del Frente Renovador de Sergio Massa, y quedó radicada en el juzgado federal número 1 que encabeza María Servini.
Para Raffo «el llamativo y reciente enriquecimiento del Dr. Freiler, que es investigado en otra causa, y las tareas a las que, según vasta información seria y pública, se dedica el Sr. Angelici (…), hace entender que los hechos mencionados son no sólo posibles sino también probables».
«Según una versión en la que coinciden varias fuentes con información inmejorable, en su momento Freiler pidió dinero a Angelici para favorecer a Macri en la causa de las escuchas ilegales. El empresario del juego se lo dio. Pero Macri le aclaró: «Si querés recuperar la plata, pedile que te la devuelva porque yo no pongo una moneda», consignó el columnista Carlos Pagni, en una nota publicada en el diario La Nación.
El 14 de junio pasado la Sala I de la Cámara Federal porteña, que integra Freiler, confirmó el sobreseimiento del presidente Mauricio Macri en la causa de las escuchas ilegales, que había sido dispuesto por el juez federal Sebastián Casanello el 29 de diciembre del año pasado, sólo 19 días después de que el presidente asumiera el comando de la Casa Rosada.
Casanello había dicho entonces que «las medidas producidas una vez reabierta la etapa de instrucción ratificaron la ausencia de prueba de cargo contra M. Macri, de donde se sigue la ausencia de responsabilidad penal pues lo afirmado hasta aquí, no sólo lo ubica en una situación de ajenidad, respecto de tal o cual intromisión telefónica, sino que también lo aleja del armado de una empresa ilegal de espionaje dentro de su gobierno».
El juez Casanello desestimó las acusaciones presentadas por las querellas del ex cuñado de Macri, Néstor Leonardo y del familiar de víctimas del atentado a la AMIA Sergio Burstein.
Dijo que en ambos casos no se presentó «prueba directa» para incriminar a Macri y en ese marco reiteró que «se descarta una posible conducta instigadora, pues Macri deja de ser la persona particularmente interesada en escuchar a dos de las víctimas».
Angelici ya es investigado en otra causa por tráficos de influencias en una causa que se inició por una denuncia de la diputada Elisa Carrió, quien acusa al presidente de Boca de ser un operador judicial del macrismo en la justicia federal.