La organización no gubernamental La Alameda denunció ante la justicia que una decena de costureros trabaja «un mínimo de 13 horas» por día en un taller textil clandestino en el que también duermen, fuera de todo marco legal, en la localidad bonaerense de Villa Celina.
El presidente de la entidad, Gustavo Vera, dijo que la denuncia fue realizada ante la Unidad Fiscal de Asistencia en Secuestros Extorsivos y Trata de Personas (UFASE) y manifestó que «hoy el taller seguía funcionando».
En un informe difundido por La Alameda, acompañado por el registro de una cámara oculta realizado por costureros de la entidad, se sostiene que el taller de cinco pisos «está regenteado por un hombre que se hace llamar Willy, que se jacta de pisar fuerte en el barrio y tener todo arreglado con la policía de la jurisdicción».
«El barrio está minado de talleres clandestinos como el que regentea Willy», expresó el informe, y manifestó que el hombre «reconoce trabajar para el Mercado Central donde dice tener puesto, al igual que en Flores, y para clientes del sudoeste de la Capital y del interior, confeccionando ropa para niños y para perros». La entidad reportó que en el taller de Villa Celina trabaja «una decena de costureros un mínimo de 13 horas (a veces más), por dos mil pesos, la mitad del sueldo de convenio por ocho horas» y afirmó que «los costureros duermen en el taller y salen de la fábrica solo cuando Willy lo resuelve».