La famosa causa de los cuadernos del chofer Oscar Centeno, viciada de origen según los abogados defensores porque nunca se realizó el sorteo de rigor para designar al juzgado interviniente, acaba de sumar un nuevo ingrediente más que pone en duda la imparcialidad con que se lleva el expediente.
El fiscal Carlos Stornelli dijo en la televisión que en el acta de la declaración como imputado colaborador del ex secretario de Obras Públicas José López no se volcó el contenido completo de lo que dijo el ex funcionario: una irregularidad completa, ya que todos los dichos del imputado deben quedar consignados en la causa.
Durante una entrevista en el canal TN, con el columnista Joaquín Morales Solá, el representante del ministerio público sostuvo que “hay miedo en la gente que declara”, y que López “contó algunas cosas que no quiso que pongamos en el acta”, quizás como una forma explicitar ese supuesto temor. “Lo que pidió que no pongamos en el acta no me gustaría ser yo quien las diga”, agregó el fiscal, ante el acta circunspecta del editorialista del diario La Nación.
Esas declaraciones de Stornelli, luego del procesamiento de la ex presidenta Cristina Kirchner como supuesta jefa de una asociación ilícita dedicada a cobrar sobornos durante su mandato ordenado por el juez federal Claudio Bonadio, le generaron al fiscal una denuncia por abuso de autoridad, encubrimiento e incumplimiento de los deberes de funcionario público, entre otros posibles delitos.
La denuncia fue presentada esta mañana por el abogado Leonardo Martínez Herrero y quedó radicada en el juzgado federal N°12, a cargo de Sergio Torres, según la asignación que realizó el sorteo de la Cámara Federal. En la denuncia el abogado pidió que quedara excluido del sorteo el juzgado de Bonadio, ya que fue justamente en ese tribunal donde se habría cometido la irregularidad.
Según el denunciante, es obligación del fiscal volcar en el acta de la declaración todos los dichos del imputado, ya que de lo contraria la declaración podría ser inducida. Además si López hubiera contado nuevos hechos se debería haber extraido testimonio para abrir una nueva causa si fuera necesario o generar un acta que quede reservada si fuera necesario por una cuestión de seguridad, pero no evitar consignar en el papel dichos que se hayan pronunciado durante la audiencia. “No debemos olvidar que es el fiscal quien debe guardar el viso de legalidad de todo el proceso penal”, sostuvo el denunciante.
López está detenido hace más de dos años, luego de haber sido sorprendido en un convento de General Rodríguez con más de 9 millones de dólares. En la actualidad está siendo juzgado en un tribunal oral por enriquecimiento ilícito junto a dos empresarios porque no pudo justificar el origen de ese dinero ni la forma en que compró un departamento y una casa en el Tigre.
En su declaración ante Stornelli, López dijo que esos 9 millones de dólares eran de la ex presidenta. Aseguró que días antes de ser detenido un secretario de Cristina Kirchner le había dicho que tenía que mover dinero y que él suponía que era de CFK. Sin embargo, en declaraciones anteriores había admitido que el dinero había estado guardado al lado del tanque de agua, en su casa de Tigre.
Con esa mágica declaración, López consiguió lo que esperaba: que le cambiaran su lugar de detención. Lo mismo obtuvieron los empresarios y ex funcionarios que dijeron haberse arrepentido, declararon y su fueron a su casa, tal como ocurrió, por ejemplo, con el primo del presidente Mauricio Macri, Angelo Calcaterra.