La ofensiva del presidente Macri contra el fuero laboral, al que calificó de mafia encabezada por el diputado nacional Héctor Recalde -histórico abogado de la CGT hasta que Hugo Moyano se distanció del kirchnerismo- tiene en vilo a los abogados y jueces la yugan día a día para impartir justicia cuando los derechos de los trabajadores son vulnerados en contextos como el actual de alta conflictividad.

“No es cierto que las empresas quiebren por los juicios laborales. Alcanza con ir a verificar en la Cámara los expedientes de quiebras. Los trabajadores siempre pierden en los concursos porque los acreedores en general arreglan antes”, explica un experto laboralista, que prefiere guardar su nombre por temor a eventuales represalias.

“Toda mi vida hice derecho laboral. ¿Sabés la alegría que te da cuando ganás un juicio y sabés que ese dinero le puede cambiar la vida a gente que se pasó la vida trabajando y que vive día a día? No sólo es cuestión de dinero, es también la satisfacción de saber que hiciste algo bien”, agrega el letrado, mientras apura un café en la Petit Colón, la tradicional confitería situada frente a la Plaza Lavalle.

“Hoy la mayor parte de los juicios laborales son por accidentes de trabajo y éstos los cubren las ART, así que no hay perjuicio para las empresas, que se encuentran cubiertas. Y a las ART no les va mal tienen ganancias enormes. Así que los argumentos son todos falaces”, insiste el abogado.

La ofensiva de Macri contra el fuero laboral se inició en forma pública el día que puso en funciones al nuevo canciller Jorge Faurie, en un acto en la Casa Rosada: ningún nexo entre la diplomacia y el mundo del trabajo. «Hay que enfrentar la mafia de los juicios laborales, hay que enfrentar y terminar porque destruye la generación de empleo futuro», dijo el Presidente. Macri sostuvo que «este grupo de estudios laboralistas, que por suerte son una minoría, con un grupo de jueces, minoritario, laboralistas, conducido por Recalde, le han hecho mucho daño a la Argentina».

En rigor, los abogados y jueces del fuero creen que detrás de las palabras del presidente se esconde un plan para flexibilizar las condiciones de contratación y despido de los trabajadores, un antiguo reclamo de los empresarios,que ven en Macri a un aliado, a uno de ellos. “Van a crear una suerte de seguro, algo así, para que puedan echar un trabajador porque tiene mal aliento”, advierte el abogado.

La respuesta de los letrados empezó a tomar cuerpo. La Asociación de Abogados Laboralistas (AAL) anunció que denunciará al presidente Macri ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT) por por sus sistemáticos ataques a jueces, abogados y las leyes laborales.

El presidente de AAL, Matías Cremonte, afirmó: “Me parece importante marcar como hito, o como primer paso de esta avanzada que denunciamos en la OIT sobre los trabajadores, el ataque a la independencia del Poder Judicial con la designación de dos jueces en la Corte Suprema, por decreto de parte del presidente Macri”.

“Otro elemento –agregó- fue la reforma de la Ley de Riesgos del Trabajo, cimentando el terreno con la ficción de la ’industria del juicio’, ahora encima intentando cargarnos el sayo por el cierre de las pequeñas empresas por los juicios laborales cuando todos sabemos que las empresas cierran por las políticas económicas del país».

La AAL informó que además presentó otras dos denuncias contra el Gobierno en el plano internacional: una frente a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y otra ante el Alto Comisionado por la defensa de los Derechos Humanos, además de requerir una audiencia pública a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).