La vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, pidió la indagatoria de Rosana Caputo, la hermana del ex presidente del Banco Central durante el Gobierno de Mauricio Macri, Luis Caputo, por los pagos a la carpintería del líder de la agrupación de ultraderecha Revolución Federal.
Los abogados de la vicepresidenta, José Ubeira y Marcos Aldazábal, señalaron que los pagos de la empresa Caputo Hermanos a Morel. por la supuesta fabricación de muebles para un edificio en Vaca Muerta, coinciden con actividades violentas de Revolución Federal.
Por eso, consideraron que “los muebles pueden haber sido la pantalla para entregarle dinero a Morel y, así, financiar la violencia política”.
Rosana Caputo es el vínculo entre Caputo Hermanos y Morel, ya que declaró haber conocido casualmente su carpintería y resolvió encargarle, primero, muebles para un country y, después, la provisión para el edificio Espacio Añelo, en Vaca Muerta.
Sospechas
“Es necesario convocar a Rosana Caputo a prestar declaración indagatoria”, reclama el pedido cursado al juez Marcelo Martínez de Giorgi, en el marco de la investigación sobre Revolución Federal.
Los abogados de la vicepresidenta especularon que “hay tres posibilidades respecto de la contratación de Morel. Una es que no haya hecho los muebles, o parte de los muebles, y que todas las transferencias hayan tenido por objeto, simplemente, financiar a Revolución Federal”.
“Otra es que el Grupo Caputo le haya sobrepagado los trabajos, para darle dinero y así financiar a Revolución Federal. Otra es que los trabajos se hayan hecho, y que contratar a Morel haya sido una forma de ayudarlo a tener un sustento, mientras organizaba Revolución Federal”, añadieron.
En ese sentido, señalaron que “la contratación de Jonathan Morel, para la realización de la mobiliario de Neuquén, se dio en los meses en los que Revolución Federal comenzó a actuar públicamente y a practicar e incitar la violencia, contra miembros del Frente de Todos”.
El escrito subraya que “el 25 de mayo la agrupación tuvo su primera aparición pública” y, coincidentemente, un día antes “se facturaron al fideicomiso Espacio Añelo, del Grupo Caputo, más de 2,4 millones de pesos”.
El documento destaca también que la carpintería de Morel cesó los contactos con la de Francisco Javier Aris –a quien subcontrataba para los muebles de Vaca Muerta- el 30 de agosto de 2022, pese a que tenía trabajos pendientes de entrega.
El atentado contra la vicepresidenta se produjo al día siguiente, el 1° de septiembre.
La cadena de pagos –añadió el escrito- “empezó cuando surgió Revolución Federal, y se esfumó cuando se desarmó la organización, tras el atentado fallido a la vicepresidenta”.
Fuente: Noticias Argentinas