Una de las últimas fotos de Moumni.

Por Ignacio Ramirez.

Comienzahoy  el juicio oral por el homicidio de las dos turistas francesas ocurrido en Salta hace casi tres años. Luego de días de búsqueda,  negligencia policial, y apremios ilegales, fueron hallados los cuerpos sin vida de Cassandre Bouvier y Houria Moumni el 29 de julio de 2011. Las jóvenes fueron brutalmente asesinadas y violadas en la turística Quebrada de San Lorenzo.

El tribunal juzgará a los cinco imputados del asesinato. Gustavo Orlando Lasi (25), Daniel Octavio Eduardo Vilte Laxi (24) y Santos Clemente Vera (38) fueron considerados los probables autores del doble homicidio  con abuso sexual y robo por lo que la fiscalía -en su elevación a juicio- solicitó la pena de prisión perpetua a los tres imputados. En tanto que Omar Darío Ramos (48) y Antonio Eduardo Sandoval , están imputados como encubridores. Se estima que en más de 30 días declaren alrededor de 200 testigos y el juicio será transmitido en vivo.

Las victimas habían ingresado a la Quebrada el 15 de julio del 2011, aproximadamente  a las 16.23, día en que se ejecutó el doble asesinato. Luego de someterlas sexualmente, fueron asesinadas con una violencia inusitada a golpes y tiros. Bouvier y Moumni fueron ultimadas a balazos a 12 kilómetros de la ciudad de Salta y sus cuerpos fueron hallados dos semanas después. Fueron sometidas sexualmente, ejecutadas y abandonadas entre la densa vegetación de la Quebrada.

El crimen conmocionó a Salta y provocó repercusiones a nivel nacional e internacional. Las dudas del doble crimen rodearon el caso desde su inicio: una cadena de negligencias, manipulación y cuestionamientos.  Fue un crimen de las mil hipótesis y muchas dudas.

Pero la realidad es que la investigación estuvo rodeada de apremios, lentitud, desorientación judicial, negligencia, pistas falsas, procedimientos ilegales, pase de facturas, cambios en puestos claves de la seguridad provincial y presiones políticas pese a que internacionalmente felicitan los resultados de las pesquisas.

La larga cadena de errores salpicó al gobierno de la provincia de Salta, a la policía, la justicia, y al cuerpo de forenses. El crimen desnudó falencias en la política de turismo y seguridad de la provincia; como así también descuidos graves en la investigación policial y judicial como así también la escasez de recursos logísticos de las fuerzas.

A partir del crimen, el gobierno provincial había dado carta blanca a los uniformados lo que provocó procedimientos desprolijos y violaciones a los derechos humanos sin contar las presiones por el incremento de delitos, el caso de narcopolicía y los homicidios sin esclarecer, muchos que prácticamente quedaron en el olvido.

El crimen que parecía perfecto y sin solución fue ejecutado por lugareños desprolijos. El doble homicidio de las jóvenes francesas esta rodeado de torturas, negligencia policial y torpeza forense. Una investigación judicial que nunca siguió los indicios que conducían a la última noche de las victimas y los hijos del poder del exclusivo barrio privado.