Una banda narco que traía marihuana en vuelos clandestinos desde Paraguay a campos de la localidad bonaerense de General Belgrano y que guardaba las avionetas en el aeroclub de Navarro, fue desbaratada en una operación antidrogas bautizada “El Señor de los Cielos” y en la que fueron detenidas 11 personas y secuestrada media tonelada de esa droga.
Fuentes policiales informaron que se realizaron 18 allanamientos en los que se detuvo a los 11 imputados, de los cuales siete son ciudadanos paraguayos y cuatro argentinos.
«Hemos secuestrado aproximadamente quinientos kilos de marihuana. Esta banda tenía aviones que tenían que ver con vuelos a Paraguay y que venían cargados para parar en caminos vecinales», dijo el ministro de Seguridad bonaerense, Cristina Ritondo.
Ritondo señaló que durante 2016 la banda realizó «por lo menos 30 vuelos» y este año ninguno porque «tenía roto el avión», aunque los investigadores del caso siguieron con sus pesquisas para determinar cuándo iba a haber un nuevo vuelo.
«La investigación que condujo a esta banda comenzó por la venta de drogas en Chacabuco, que se estableció que procedía de Paraguay y que era comercializada también en la villa porteña 1-11-14 y en las ciudad de Junín y partidos aledaños», explicó.
El ministro bonaerense señaló que aún se deben investigar las responsabilidades de quiénes deben controlar las pistas y funcionamiento de los aeródromos.
Los allanamientos fueron realizados por efectivos de la Delegación Junín de la Superintendencia de Investigaciones del Tráfico de Drogas Ilícitas y Crimen Organizado de la policía bonaerense, quienes investigan a la banda hace varios meses.
Los 500 kilogramos de la droga estaban dispuestos en 533 ladrillos de marihuana y que los detenidos están a disposición del Juzgado Federal de Mercedes, que los indagará en las próximas horas.
El intendente de municipio de Navarro, Santiago Maggiotti, explicó hoy que la marihuana no fue secuestrada en Navarro, sino que en el aeroclub de su distrito se incautó la avioneta utilizada por la banda y “se detuvo a dos pilotos que presuntamente ya habían dejado el cargamento con droga en el distrito de General Belgrano”.
En total fueron secuestradas tres avionetas, algunas de las cuales eran empleadas para los vuelos clandestinos desde Paraguay y otras, que pasaban desapercibidas por tratarse de naves fumigadoras, hacían vuelos de reconocimiento.
La banda operaba también en Uruguay y Brasil donde su cabecilla ya tuvo antecedentes por el mismo delito y estuvo imputado en una causa donde le secuestraron una avioneta y drogas y por ello se escapó de ese país y, de acuerdo a la investigación, se instaló en la villa 1-11-14 desplegando el mismo modus operandi.
La causa se inició a partir de la investigación que hicieron los detectives de Tráfico de Drogas Ilícitas de Junín sobre un hombre que se dedicaba a la comercialización de estupefacientes en Chacabuco, por lo que se intervinieron varias líneas telefónicas y see determinó que la organización operaba además en las ciudades de Junín, General Arenales, General Viamonte y Lincoln y que la marihuana era vendida a proveedores de Capital Federal y el Gran Buenos Aires.
La droga era introducida vía aérea con vuelos provenientes de la ciudad paraguaya de Asunción y para ellos utilizaban dos avionetas.
Según la investigación, actuaban tanto pilotos paraguayos como otros argentinos que trabajaban en la fumigación aérea de campos y residían en General Belgrano y San Miguel del Monte, lugares utilizados para descender con la carga de marihuana.
Los voceros explicaron que antes de bajar la droga, la organización hacía vuelos de reconocimiento para chequear que no hubiera inconvenientes y para ello, para no levantar sospechas, utilizaban otros aviones fumigadores no aptos para transporte.
Luego de varios meses y 6.000 horas de escuchas telefónicas, se logró determinar que una aeronave estaba en el hangar del aeroclub de Navarro y otra en General Belgrano donde rentaban un espacio para ser guardadas.
La banda bajaba las avionetas en caminos rurales o descampados recomendados por los fumigadores cómplices, quienes cobraban por indicarles a los narcos sitios seguros donde descender la droga.
La policía también secuestró cuatro autos que la organización usaba como satélites en tierra para hacer punta y detectar operativos y controles policiales y así poder alertar al vehículo que llevaba la droga.
Los allanamientos fueron realizados el viernes cuando se determinó que una de las avionetas había bajado en General Belgrano con los 500 kilos de marihuana y luego volvió a despegar con destino a Navarro, en cuyo aeroclub volvió a descender.
Allí personal de la división aérea de la policía y de Drogas Ilícitas la interceptaron y detuvieron al piloto paraguayo y otros dos imputados de la misma nacionalidad, uno de ellos, sobrino del jefe narco que se presume vive oculto en la villa 1-11-14 del Bajo Flores.