Antes de convertirse en el primer vicepresidente en ejercio que es citado a prestar declaración indagatoria Amado Boudo presentó un escrito ante el juez federal Ariel Lijo para pedir que se lo autorice a grabar su propia declaración.

La semana pasada el juez rechazó el pedido del vicepresidente de que su declaración pudiera ser transmitida en vivo por televisión, al señalar que esa posibilidad no está prevista en el actual Código Procesal Penal.

Ayer el fiscal general adjunto de la ciudad de Buenos Aires, Luis Cevasco, sostuvo que no deberían existir impedimentos para que Boudou pudiera registar en video su declaración indagatoria por la venta de la imprenta Ciccone.

El vicepresidente ha hecho de la difusión pública de su declaración su principal caballito de batalla en los días previos al acusar al juez de haber sido inluenciado por los diarios Clarín y La Nación en el trámite de la causa.

Lijo citó originalmente a Boudou para declarar el 15 de julio, pero la defensa del vicepresidente pidió que se adelantara el trámite. Pero el mismo tiempo, presentó un escrito en el que solicitó que se anule la citación, cuestión que aún no se resolvió.