Un hombre fue asesinado a tiros en un kiosco durante esta madrugada en el barrio porteño de Recoleta, cuando se bajó a comprar algo en un kiosco y fue atacado a balazos por una persona que se fue del lugar caminando.

Por la forma en se produjeron los hechos, en los que no hubo un robo ni una resistencia por parte de la víctima como en otros casos, se presume que se pudo tratar de un homicidio por encargo ejecutado por un sicario.

El hecho ocurrió alrededor de las 2 de la madrugada de este jueves en Paraguay 2900 cuando la víctima iba a entrar al comercio.

En ese instante, un sujeto bajó de un vehículo que estaba estacionado frente al negocio, se acercó hasta el lugar y le efectuó al menos cinco disparos.

Según se informó, la víctima recibió tres tiros en la espalda, se desplomó y falleció, mientras que el agresor no se volvió a subir al auto del que se bajó, se escapó a pie del lugar, por lo que se se supone que otro vehículo lo estaría esperando.

Todas las escenas quedaron registradas en las cámaras de seguridad tanto de la cuadra donde ocurrió el crimen como en las que están en la vereda de enfrente del local.

Se supo que la Policía halló en el lugar 4 vainas y, según trascendió, el agresor estvo  los días previos realizando un trabajo de inteligencia para ver los movimientos del hombre ya que el auto del que se bajó fue visto por testigos en la zona.

En el lugar trabajaron efectivos de la Policía Científica y de la Ciudad quienes tomarían declaraciones al kiosquero y al menos a una persona que habría presenciado el episodio.

Varios disparos por la espalda

Ese testigo le dijo a la Policía que el atacante descendió de un auto, y sin mediar palabras, efectuó varios disparos y luego escapó a pie. Por lo que se entiende que lo estaba esperando y que conocía su rutina.

En uno de los videos se ve como el atacante baja de un auto que estaba estacionado en la misma vereda del kiosco y cuando llega la víctima baja y le dispara varias veces por la espalda con un silenciador.

Los auxiliares del SAME que llegaron hasta el lugar constataron que el hombre, cuya identidad no trascendió hasta ahora, estaba muerto.

Su cuerpo lo llevaron hasta la morgue judicial donde se le realizó la autopsia y la toma de huellas digitales, pero sorprende que no tiene tatuajes ni marcas que puedan facilitar su reconocimiento.

El fiscal Marcelo Roma logró identificar a la víctima: se trata de Fabián Sturm Gardon, un ciudadano uruguayo de 42 años.

La confirmación llegó gracias a los datos que aportó su pareja, quien se presentó a declarar en la fiscalía.

Todo apunta a un posible ajuste de cuentas relacionado con la compra y venta de autos, un negocio al que se dedicaba la víctima.

Buscan huellas

Con respecto al auto Volkswagen Suran gris que el homicida utilizó para ir hasta el lugar, y el cual abandonó se hicieron peritajes para tratar de obtener huellas que permitan identificar al agresor.

Los investigadores creen que el vehículo en cuestión tiene una patente melliza, por lo que continúan observando de cerca los documentos y números de chasis para obtener mayor información.

La pista más firme hasta ahora es que se trataría de un ajuste de cuentas. Esta hipótesis toma fuerza por el accionar del caso.

Se debe a que el atacante utilizó un silenciador, se habría puesto peluca, usaba anteojos y fue directo hacia la víctima sin mediar palabras.