
La Policía de la Ciudad de Buenos Aires detuvo a tres personas, entre ellas un oficial de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, acusados de comercializar granadas de gas lacrimógeno a través de Marketplace, el sitio de venta de diferentes productos de Facebook.
Los arrestos se llevaron a cabo tras dos allanamientos realizados en las localidades de Luis Guillón y El Jagüel, en el sur de Gran Buenos Aires. Enorme fue la sorpresa de los agentes cuando descubrieron que uno de los sospechosos era un colega.
Según se informó, en febrero de este año, la División Antiterrorismo de la Policía de la Ciudad, que realizaba tareas de ciberpatrullaje, detectó un usuario que ofrecía a la venta granadas lacrimógenas en el sitio Marketplace.
En ese lugar se venden en general cosas usadas de todo tipo, pero lo llamativo es que ofrecieran granadas de gas. Este tipo de elementos están prohibidos para el uso de civiles y únicamente autorizados para personal de las fuerzas de seguridad.
Era policía
Gracias a las investigaciones realizadas, con anuencia del Juzgado Federal de Primera Instancia en lo Criminal y Correccional Nº 2 de Lomas de Zamora, a cargo de Luis Antonio Armella y ante la Secretaría 13 de Augusto Peloso, se constató que el sujeto que las comercializaba era un oficial de la Policía de la Provincia de Buenos Aires.
Los pesquisas pudieron determinar que el sospechoso prestaba funciones en la Fuerza Barrial de Aproximación (FBA) en el partido de Esteban Echeverría, y que se valía de su puesto para acceder a este material e ilegalmente venderlo.
Conforme a los resultados obtenidos, el magistrado libró dos órdenes de allanamiento: una en el domicilio del efectivo policial, en la localidad de El Jagüel, donde se secuestraron seis granadas lacrimógenas; y la otra en un domicilio de Luis Guillón, donde fueron detenidas dos personas, un hombre y una mujer.
En este lugar, la Policía de la Ciudad incautó dos armas de fuego sin documentación, seis municiones calibre .38 y un estuche de plástico con 32 municiones calibre 9 mm. Todos los elementos quedaron a disposición de la Justicia federal.