En un caso plagado de contradicciones, dos hombres comenzaron a ser juzgados este miércoles por la violación y homicidio de Anahí Benítez, una adolescente de 16 años que fue retenida, drogada, violada y estrangulada en 2017 en la reserva Santa Catalina de Lomas de Zamora.
Por el hecho ya hubo un juicio oral, que luego fue anulado. Uno de los hombres, Marcos Bazán, había sido condenado por el crimen, mientras que el otro, Marcos Villalba, quedó fuera del proceso porque los peritos dijeron que no estaba en condiciones psíquicas para afrontarlo.
Por el femicidio, Bazán fue condenado a la pena máxima en junio de 2020 pero en diciembre de 2021 la misma Sala I del Tribunal de Casación Penal bonaerense anuló ese fallo y ordenó que se realizara un nuevo juicio oral en el que, además, deberá ser juzgado Villalba.
La familia de la adolescente sostiene que los dos hombres fueron responsables del secuestro, abuso y homicidio de la menor, cuyo cuerpo apareció seis días después de la desaparición en el predio de Santa Catalina, donde se encuentra el rectorado de la Universidad de Lomas de Zamora.
Sin embargo, Bazán es defendido en este juicio por Manuel Garrido, un prestigioso abogado director de Innocence Proyect Argentina, una organización sin fines de lucro que interviene en casos en los que se vulneran los derechos de los imputados o se los acusa sin pruebas claras.
«La Justicia debe actuar con racionalidad, es lo que dice la Ley, esperamos que, en ese marco, Bazán quede libre de culpa y cargo«, dijo el abogado en declaraciones a la agencia Télam.
«A mí me gustaría que los acusados hablen porque yo estoy segura que seis días de secuestro, violación y torturas no fueron hechas solo por dos personas, que digan los nombres de todos los que participaron«, dijo a su vez Silvia, madre de la víctima, constituida como particular damnificado con los abogados Guillermo Bernard Krizan y Fernando Herrera.
Bazán resultó absuelto por la Sala I de la Cámara de Casación Penal bonaerense, integrada por los jueces Daniel Carral y Ricardo Maidana, tras un reclamo que venían realizando distintos organismos de derechos humanos, entre ellos el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) o la organización Innocence Project, que consideran que se trata de una «causa armada».
Casación no solo anuló el veredicto condenatorio y la prisión perpetua para Bazán, sino que ordenó la realización de un nuevo juicio oral en el que, además de este imputado, deberá ser juzgado el otro sospechoso que había llegado a debate el año pasado, Marcelo Sergio Villalba (44), quien fue beneficiado por un peritaje que determinó que padecía trastornos psiquiátricos.