| Personaje central de la muerte de Nisman

Quiénes reman la tesis de que Lagomarsino es un espía (y quien se beneficia)

Uno de los abogados de familiares de víctimas de Cromañón fue quien dijo que Lagomarsino aparecía en las marchas a fotografiarlos. Pero otros familiares lo niegan. La acusación de un ex espía a Stiuso.

Lagomarsino en la conferencia de prensa.

Lagomarsino en la conferencia de prensa.

Rafael Saralegui

Diego Angel Lagomarsino ocupa un papel central en la trama de la muerte del fiscal federal Alberto Natalio Nisman. Por lo que se sabe, es la persona que le entrega el arma el sábado y con la que aparece muerto el domingo. Además, tenía un importante contrato, cobraba 41 mil pesos mensuales por realizar tareas informáticas y fue el propio Nisman quien lo llevó a trabajar con él.

En los últimos días se echó a rodar la versión, recogida acá en CyR, de que Lagomarsino podría ser algo más que un simple experto en redes y computadoras algo así una suerte de espía, inorgánico. En despachos judiciales hay quienes creen que podrían ser una suerte de “topo” en la UFI-AMIA.

Para alimentar esa tesis, el abogado José Iglesias, que representó a familiares en la causa por la tragedia del boliche Cromañón, sostuvo que Lagomarsino había concurrido a varias de las marchas en reclamo de justicia y que se había dedicado a sacar fotos a los familiares de las víctimas. También dijo que había estado en su casa sacando fotos a los recuerdos de su hijo. Dijo que un día desapareció misteriosamente y que una vez se lo cruzó en la calle y cambió de vereda. El secretario general de la Presidencia, Aníbal Fernández, fue quien se encargó de amplificar los dichos de Iglesias, cuestionado por sus colegas en su actuación en la causa de Cromañón.

Por sus conocimientos en informática se vinculó Lagomarsino con el ingeniero Antonio “Jaime” Stiuso, el ex hombre fuerte de la ex Side, desplazado de su cargo en diciembre, cuando el Gobierno descabezó la cúpula que había sido nombrada en su momento por Néstor Kirchner. En la conferencia de prensa que dio Lagomarsino, su abogado Maximiliano Rusconi, negó que su cliente fuer agente o que conociera a Stiuso. En una nota que se publicó en el diario Página 12,una jueza amiga de Lagomarsino sostuvo que Nisman le había dicho que Stiuso le recomendó que se cuidara y desconfiara de su custodia.

Abogados que trabajaron en la causa por la tragedia de Cromañón dijeron que familiares de las víctimas no coinciden con los dichos de Iglesias y que nunca vieron a Lagomarsino en ninguna marcha. Siembran dudas sobre los verdaderos intereses de Iglesias, a quien vinculan como muy cercano al Gobierno. “Debe favores”, dicen. Iglesias no sólo habló en los medios, sino que también se presentó en la fiscalía de Viviana Fein para contar la misma historia.

Si Lagomarismo es un espía como sostiene Iglesias y Aníbal Fernández, la trama se comienza a inclinar para la tesis que abona buena parte del gobierno: que la muerte de Nisman fue una venganza de los sectores desplazados de la ex Side en diciembre. En la misma línea se inscriben las declaraciones de Iván Velázquez, ex agente de la Side, procesado en una causa por la jueza federal de San Isidro, Sandra Arroyo Salgado, la ex mujer de Nisman. Velázquez dijo a Perfil.com al ser consultado sobre la muerte de Nisman:  “Creo que fue un suicidio. La persona que lo traicionó fue el mismo Jaime Stiuso porque Nisman le pidió unas escuchas para completar el informe final y se las negó. Jaime le dijo que no. La denuncia es lo que dijo Pepe Eliaschev y había muchas cosas más que no aparecieron. Se vio víctima, padeció una puñalada trapera que la sufren todos los del entorno de Jaime. Se vio solo y se mató”.