| Recusación

Otranto fue separado y el nuevo juez sólo deberá investigar la desaparición de Maldonado

Gustavo Lleral quedó a cargo de la causa, luego de que la Cámara hizo lugar a la recusación. La familia espera que investigue a la Gendarmería.

Lleral recibe el saludo del gobernador Das Neves.

Lleral recibe el saludo del gobernador Das Neves.

Durante los próximos 60 días el juez federal Gustavo Lleral deberá dedicarse exclusivamente a investigar la desaparición de Santiago Maldonado, visto por última vez el 1° de agosto en el Pu Lof en Resistencia que una comunidad mapuche ocupa en el departamento Cushamen, en la provincia de Chubut.

Lleral se convirtió en el flamante titular del Juzgado Federal N°2 de Rawson en noviembre del año pasado y la Cámara Federal de Comodoro Rivadavia resolvió hoy aceptar la recusación del juez federal de Esquel, Guido Otranto, y designarlo al frente del caso que más preocupa hoy al Gobierno.

La Cámara Federal no sólo aceptó la recusación de Otranto, planteada por la familia de Maldonado y el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), sino que dispuso además que al menos durante los próximos 60 días se dedique con exclusividad a las dos causas abiertas por la desaparición de Maldonado.

Durante ese lapso todos los expedientes que estaban a su cargo, serán subrogados por el juez federal N°1 de Rawson, Hugo Sastre. La decisión de disponer que Lleral sólo se encargue de la desaparición de Maldonado indica la importancia que se le quiere adjudicar al caso.

«No puede dejar de advertirse que la situación se presenta como urgente, por lo que no admite demoras facilitar el inmediato avocamiento del magistrado designado al conocimiento de las actuaciones a las que deberá avocarse», dijeron los camaristas federales de Comodoro Rivadavia, al resolver la cuestión.

Los camaristas entendieron que en el reportaje que Otranto dio al diario La Nación el fin de semana anterior, adelantó su opinión sobre la causa, cuando dijo que pensaba que Maldonado se había ahogado y al afirmar también que no encontraba inconsistencias en las declaraciones de los gendarmes.

Lleral se hizo cargo del juzgado federal N°2 que fue creado por una ley impulsado por el entonces senador Marcelo Guinle, quien luego fue ministro del Tribunal Superior de Justicia de Chubut y que fue uno de los asistentes a la ceremonia de su jura, la cual concurrió el actual gobernador, Mario Das Neves. Guinle falleció en junio de este año.

La familia de Santiago Maldonado espera que la causa se encamine ahora a investigar la responsabilidad de la Gendarmería en la desaparición del joven tatuador. En la causa hay varios testimonios de mapuches quienes dijeron que los gendarmes se llevaron a Santiago después de haber ingresado en el predio que ocupan desde 2015 el 1° de agosto, sin contar con una orden escrita que los habilitara a ingresar en el predio.

Lleral hizo su carrera tanto en la justicia ordinaria de Chubut como en el fuero federal. Se recibió de abogado en la Universidad Nacional de La Plata en 1988. Fue prosecretario letrado de la Defensoría General; secretario del Juzgado Letrado de Primera Instancia en lo Correccional Nº 1, y secretario del Juzgado Federal de Rawson desde finales de 2006 hasta noviembre del año pasado cuando asumió como titular del nuevo Juzgado Federal de primera instancia N°2.

Ahora le toca hacerse cargo de la causa más importante de su carrera judicial. El juez Otranto se expulsó el mismo del expediente cuando dijo: «Los abogados lo único que tienen son críticas a la investigación, pero aportes de testigos, ninguno. Un hábeas corpus no es un proceso contencioso: deberíamos estar todos interesados en descubrir qué pasó. Por eso a mí me llama la atención esta falta de colaboración en acercar a los testigos. Ya es un problema citarlos: si va la policía se generan problemas».

El juez no fue preciso en esa aseveración. La mayor parte de los testigos mapuches que declararon en el expediente fueron acercados por el CELS y la familia de Santiago. Pero Otranto no les creyó y prefirió quedarse con los testimonios de los gendarmes, que comenzaron a desfilar por su juzgado luego de haber recibido en forma sucesiva a funcionarios de los ministerios de Justicia y Seguridad del gobierno nacional.