| Hostigamientos virtuales

Te puede pasar: el peligro creciente de la venganza digital (qué hacer)

Amantes despechados usan las redes sociales para atacar a sus ex parejas. Publican fotos o videos íntimos. Casos de amenazas, extorsiones y calumnias en la web.

Lo más habitual es la difusión de fotos íntimas.

Lo más habitual es la difusión de fotos íntimas.

Por Ignacio Ramírez

La venganza digital por odio o despecho es una gran bola de nieve que no para de crecer en la web. El uso de filmaciones caseras, los escraches, los hostigamientos digitales, las difamaciones anónimas y las amenazas a personas públicas y privadas es una realidad, que según los especialistas, tiene cada vez más adeptos.

Una de las formas más habituales es el uso de la pornografía no consentida: mostrar, compartir o publicar fotos o videos de otra persona desnuda o mientras mantiene relaciones sin su consentimiento. “La venganza es realizada la mayoría de las veces por amantes despechados para humillar, extorsionar, amenazar a una novia o novio anterior con fotos de desnudos publicadas en sitios web o distribuidos entre los círculos sociales”, relata el abogado Daniel Monastersky director de la consultora jurídica especializada en derecho informático identidadrobada.com y quien viene trabajando en la temática desde hace más de diez años.

También preocupa a especialistas el aumento en el último año de venganzas a través de Internet con amenazas, extorsiones, comentarios falsos, calumnias e injurias. Informaciones simuladas que tienen un simple común denominador: menoscabar y generar una impresión falsa de la víctima, generándole un daño concreto y malintencionado a su imagen.

Crecen los casos de fotos íntimas que se publican en los sitios de porno, una venganza en la que la principal damnificada son ex parejas mujeres. Actualmente, existen sitios en donde los usuarios publican fotos de personas desnudas junto con el nombre completo de la víctima, sus perfiles en las redes sociales, su profesión y ciudad de residencia. Al publicarlas, los caranchos de la identidad se aseguran que las fotografías salgan en los resultados de búsqueda de Google, potenciando el daño causado a las víctimas.

“Los que generan estos contenidos son personas con una personalidad obsesiva que no se detienen nunca en busca de ese objetivo, destruir a la persona. Por eso siempre se recomienda denunciar estos hechos en la Justicia”, recomienda Monastersky. El especialista fue quien denunció al llamado “Camus Hacker” a principios de este año. Ya se ha pedido que preste declaración indagatoria luego de identificar que la cuenta de Twitter, mediante la cual se difundían las fotos de los famosos, los llevara directamente al domicilio donde residía.

La consultora jurídica www.limpiatunombre.com, que realiza gestiones legales y judiciales necesarias para poder identificar a la persona que ha generado los comentarios negativos, enumeró algunos casos de víctimas:

G.G. Empleado administrativo

“Me hackearon el correo electrónico y esa información fue enviada a mis contactos personales y laborales. Esto me está generando graves problemas familiares y también en el trabajo. Necesito identificar a la persona que hizo eso”.

R.B. Cirujano Plástico

“Un ex empleado de mi centro de estética, que había sido despedido por injurias graves, generó contenido totalmente difamatorio sobre mi persona y mi actuación como profesional de la salud en gran cantidad de blogs. Esa información falsa me está generando un daño irreparable”.

F.W. Gerente de Recursos Humanos

“Una persona que aspiraba al mismo puesto gerencial que yo generó contenido en internet en donde se me acusaba de que abusaba de las candidatas en las entrevistas laborales. Tuve que renunciar y dejar la ciudad por la presión que esa cuestión ejerció dentro de la compañía y la comunidad. Mis posibilidades laborales están limitadas mientras esa información siga en Internet”.