Una mujer argentina que había sido secuestrada en 1987, cuando era adolescente para ser explotada en un prostíbulo en Bolivia, fue rescatada por la Gendarmería y pudo celebrar su primera Nochebuena en familia después de 32 años, informó la fuerza de seguridad.
La mujer, actualmente de 45 años, fue rescatada el sábado pasado junto a su hijo de 9 de un garaje en la ciudad boliviana de Bermejo donde eran sometidos a explotación laboral en condiciones de esclavitud, consignó el diario Popular.
Efectivos de la Unidad de Investigaciones y Procedimientos Judiciales “Orán”, en diciembre de 2014 recibieron un oficio judicial a fin de efectuar tareas de investigación (por infracción a la Ley 26.364) para dar con el paradero de una ciudadana de nacionalidad argentina quien habría sido llevada por una red de trata de personas hacia el Estado Plurinacional de Bolivia, hace 32 años aproximadamente.
La Gendarmería informó que durante los primeros meses de este año, se reunió información que la mujer se encontraba en la ciudad de Bermejo (Bolivia), por lo que se informó a la Fiscalia Federal de Orán y se ampliaron las pesquisas, confirmando que la ciudadana se encontraba allí con su hijo menor de edad.
De este modo se coordinaron actividades entre Gendarmería Nacional y la Fuerza Especial de Lucha contra el Crimen (FELCC) de la Policía Nacional de Bolivia, Unidad Bermejo con el objeto de restituir a su hogar a la señora y al menor. Como resultado del trabajo realizado, se logró dar con el paradero de ambas victimas (de 45 y 9 años), y se efectuaron las coordinaciones necesarias para el traslado hacia el territorio nacional.
Posteriormente, se llevó a cabo el legal ingreso al país por el Paso Internacional Aguas Blancas-Bermejo, siendo trasladadas por integrantes de la Unidad de Investigaciones y Procedimientos Judiciales «Orán» hacia la ciudad de Orán. Finalmente, viajaron con destino la ciudad de Mar del Plata (Buenos Aires), donde se reencontraron con sus familiares.
La investigación
La mujer había sido llevada con engaños hacia Bolivia y desde entonces su familia oriunda de la ciudad de Mar del Plata no había dejado de buscarla. En 1987, un ciudadano boliviano identificado en la causa como «AC», de unos 50 años, se llevó a Bolivia a la víctima, que por entonces tenía 13 años, y a su hermana mayor, con quien estaba de novio, junto a un bebé de pocos meses de vida bajo la promesa de que en ese país conseguirían trabajo.
Después de tres meses, la hermana mayor de la víctima se peleó con el captor y volvió a la Argentina pero le impidieron traer a su hijo. Al regreso, la hermana de la víctima denunció que las habían engañado porque una vez que llegaron al destino el hombre que las llevó las obligó a trabajar en un prostíbulo propiedad de su propia hermana, identificada como Lola C, aunque no pudo precisar la ciudad y el lugar exacto donde se ubicaba.
La denuncia fue puesta en conocimiento de la procuraduría de Trata y Explotación de Personas, el 18 de julio de 2014, que libró un oficio a Interpol de Argentina, para que con sus colegas bolivianos buscaran a la mujer. Las fuentes señalaron que entre octubre y noviembre últimos, los investigadores confirmaron que la mujer buscada trabajaba en un puesto de comida al paso en el Mercado Central de Bermejo.
Ante ello, entre el 17 y 21 de diciembre se coordinaron las tareas para localizarla y «restituirla a su hogar junto a su hijo», añadieron. La mujer le narró a las autoridades bolivianas que deseaba volver a la Argentina con su hijo pero que la ciudadana para la cual trabajaba no la dejaba y le retenía los documentos de ambos, por lo que funcionarios judiciales y policiales de Bolivia encabezaron un operativo para recuperar la documentación.