El Tribunal de Casación Penal bonaerense redujo de 49 a 40 años la condena impuesta en 2012 al hombre conocido como «sátiro de la bicicleta» por violar a 30 mujeres entre 2005 y 2006 en La Plata, se informó en tribunales.
Se trata de Emiliano Perandones Pérez (28), quien fue condenado el año pasado por el Tribunal Oral Criminal (TOC) 5 de la ciudad de La Plata por 29 casos de vejaciones de las que fueron víctimas 30 víctimas, debido a que en un solo hecho abusó de dos jóvenes. Aún se investiga, además, si Perandones Pérez es autor de otros 23 casos de abuso sexual ocurridos en la capital bonaerense.
La Sala V del Tribunal de Casación Penal provincial tuvo en cuenta, para reducir la condena de 49 a 40 años, que el hombre posee «rasgos psicopáticos», según diagnosticaron peritos durante el juicio. Para los jueces de Casación, ese trastorno de la personalidad «debe ser interpretado como un factor que redujo la posibilidad de autodeterminarse, cuestión que guarda relación con la responsabilidad de su conducta».
Ese rasgo psicopático «limita el grado de culpabilidad, debiendo repercutir ello en la determinación de la pena», consideró la Sala V y redujo 9 años la pena impuesta.
El 19 de septiembre de 2012, el TOC 5 de La Plata condenó al «sátiro de la bicicleta» a 49 años de prisión tras tener en cuenta los reconocimientos en rueda que hicieron las víctimas, los resultados de cotejos de ADN y los peritajes médico-forenses que lo describieron como un “psicópata que no tiene empatía con el dolor de la víctima”.
Perandones tenía antecedentes de violación, ya que cuando era menor de edad había abusado sexualmente de una mujer en la localidad de Adrogué, delito por el cual no se lo condenó por ser inimputable.
Ya de adulto cometió otra violación por la que fue condenado a7 años de prisión, aunque por buena conducta, sólo cumplió la mitad de esa pena.
Al salir en libertad en 2005, se estableció en La Plata, en casa de su novia, y semanas después comenzaron los abusos sexuales en los barrios platenses de Tolosa, Ringuelet, San Carlos, Altos de San Lorenzo, Hipódromo, uno en la ciudad de Berisso y otro en Ensenada.
En diciembre de 2006, fue detenido luego de que una de las víctimas lo reconoció mientras despachaba combustible en una estación de servicio ubicada en la avenida 122, en la localidad de Ensenada.
El hombre tenía como modus operandi estudiar los movimientos de sus potenciales víctimas, a las que luego interceptaba en la vía pública y, bajo amenazas con un arma de fuego, las obligaba a caminar junto a él simulando ser su novia.
Luego, las subía a la bicicleta y las trasladaba hasta un descampado o una vivienda deshabitada, donde las violaba, tras lo cual les pedía una prenda íntima para llevarse y les decía que cuenten hasta 200 mientras se alejaba.
Además, se acreditó que a las jóvenes que se resistían las tomaba del cuello y las asfixiaba hasta que accedieran a su deseo y, mientras a algunas de ellas les robó el poco dinero que tenían, a una le dejó plata para que se compre la denominada pastilla “del día después”.