El fiscal federal Gerardo Pollicita pidió procesar al ex titular de la AFIP Ricardo Echegaray y a los empresarios, Cristóbal López y Fabián De Souza, por defraudación y administración fraudulenta por una supuesta evasión impositiva de la empresa Oil Combustibles.
El titular de la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional Federal N°11 solicitó al juez Julián Ercolini el procesamiento de otras 19 personas y además que se disponga el embargo de los bienes de los empresarios hasta cubrir una suma de casi 9.000 millones de pesos.
Según informó la página del Ministerio Público en la causa se investiga a ex funcionarios de la AFIP por posibles maniobras que habrían favorecido ilegítimamente a los empresarios de la firma Oil Combustibles a través de distintas irregularidades en “el acogimiento y otorgamiento de planes de facilidades de pago respecto del Impuesto a los Combustibles Líquidos que dicha firma debía ingresar al fisco y que, en cambio, utilizó para expandir y capitalizar el conglomerado económico Grupo Indalo”.
Según el dictamen “los imputados participaron en forma coordinada con el fin último de beneficiar a Oil Combustibles y a sus responsables López y De Sousa, ocasionando al Estado Nacional un perjuicio de más de $ 8.900 millones de pesos como resultado directo del accionar deliberado desplegado”.
Pollicita escribió además que los entonces funcionarios públicos “debían administrar con transparencia y diligencia los intereses pecuniarios del Estado exteriorizados en el derecho de cobro de una deuda por un importe superior a los 8.900 millones de pesos. Contrario a ello, los nombrados, en connivencia y de forma coordinada, incumplieron los deberes a su cargo –por acción en algunos casos y mediante omisión en otros– y con sus intervenciones permitieron que OIL COMBUSTIBLES postergara indefinidamente el pago en forma irregular –acumulando deuda–, al mismo tiempo que se alzaba en forma indebida con la suma de mención, la que utilizó en provecho de la expansión del grupo –adquiriendo nuevos activos y capitalizando a las empresas del grupo que requerían de esos fondos para su desarrollo.”
Sobre Echegaray, Pollicita sostuvo que el ex funcionario otorgó «en forma directa y personal» y «sin hacer ningún tipo de control» un plan de pagos por «una suma sideral de dinero ($980.668.085,44)» pese a que «su función primordial era propender a la recaudación de tributos».
El entonces funcionario sabía «que la firma no sólo era una de las mayores deudoras del organismo, sino que –además– con el dinero que percibía, de los consumidores finales que cargaban combustible, se encontraba fondeando, de forma constante, a otras empresas del grupo a través de mutuos e invirtiendo en nuevos activos, y todo en detrimento de las arcas públicas», advirtió el fiscal.