| Mala administración

María Julia Alsogaray va por un récord: enfrenta su sexto juicio oral por corrupción

Está acusada de administración fraudulenta. Es por una serie de contrataciones para remodelar la sede de la Secretaría de Medio Ambiente cuando estaba a su cargo.

La ex polifuncionaria menemista María Julia Alsogaray enfrentará un nuevo juicio oral, esta vez llega acusada de defraudación por administración fraudulenta en perjuicio del Estado nacional junto a otros tres imputados. La ex titular de la Secretaría de Recursos Naturales y Ambiente Humano deberá responder por una serie de obras de remodelación realizadas entre 1995 y 1998 en la sede del organismo que  en el marco de las obras de remodelación y mantenimiento realizadas en la sede de la ex Secretaría de Recursos Naturales y Ambiente Humano entre 1995 y 1998. Los otros acusados son el ex subsecretario de Desarrollo Sustentable Enrique Kaplan y los ingenieros Arturo Juan y Santiago María Bignoli

Ante el Tribunal Oral en lo Criminal Federal N°6, integrado por José Martínez Sobrino, Julio Panelo y María del Carmen Roqueta, actuarán en representación del Ministerio Público la fiscal Sabrina Namer y Miguel Yivoff como ad-hoc. Las audiencias del debate oral y público se realizarán los martes y los jueves y se espera que declaren alrededor de 100 testigos.

De acuerdo al requerimiento de elevación a juicio, desde 1995 hasta 1998 y mediante la violación de diversas normas de administración financiera y de contrataciones del Estado, los imputados cometieron irregularidades en la remodelación y mantenimiento del edificio de la calle San Martín 459. Las maniobras habrían significado un beneficio patrimonial ilegal y un perjuicio para las arcas públicas.

A través de resoluciones y actas que firmadas por Alsogaray y Kaplan, la Secretaría de Recursos Naturales realizó la contratación directa de Bignoli -padre e hijo- para el relevamiento y posterior refacción del inmueble, lo que habría violado el régimen previsto.

A su vez, las obras encomendadas fueron fraccionadas por etapas delimitadas y por el sistema de contratos separados por rubros menores a cien mil pesos, lo que encareció el precio final de lo que se podría haber hecho en un único proyecto. De esa forma, según la acusación, “se evitó el procedimiento licitatorio impuesto como regla por la legislación pertinente. Esto tuvo como resultado un beneficio tanto para las empresas prestatarias de bienes y servicios -en razón de los sobreprecios posteriormente determinados- como para los ingenieros Bignoli, pues sus honorarios se encontraban directamente relacionados con el monto total que demandara la obra”. Además, en las dos etapas se advirtió la contratación reiterada de determinadas firmas, como Mag SRL y Del Río Construcciones, cuyos integrantes resultaron ser conocidos de los Bignoli.

Por otra parte, se celebró un fideicomiso con el Banco de la Ciudad de Buenos Aires para que administre los fondos destinados a la obra. Ese acuerdo habría permitido “sustraer el dinero de la esfera de control de los organismos del Estado Nacional”. Entre 1995 y 1998, desde el organismo se libraron órdenes de pago a la Secretaría de Hacienda a favor del Banco por gastos consignados como devengados, sin contraprestaciones que los fundamentaran. “Es decir, por medio de devengamientos ficticios, se transfirieron a la cuenta abierta en el Banco Ciudad importantes sumas de dinero que correspondían a remanentes de ejercicios anteriores, que debieron haber sido devueltos a las arcas públicas”, señala la acusación fiscal.

Se trata del sexto juicio que enfrentará la ingeniera Alsogaray por su paso en la función pública, en tanto que para marzo del año que viene se prevé que comience otro por sobresueldos y en el que también están acusados Kaplan, el ex presidente Carlos Menem y el ex ministro de Economía Domingo Cavallo, entre otros.

Fuente: Fiscales.


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