Por Ignacio Ramírez.-
Para sus amigos y fanáticos, Esteban “Toto” Piccinin (39) está pasando por un infierno producto de la mentira y la maldad de su ex mujer Romina Luján Meneghini de Piccinin (32), quien evoluciona favorablemente y se encuentra internada desde hace 15 días en el área de terapia intensiva de la clínica Constituyentes, del partido de Morón, luego de haber recibido un disparo con una escopeta que estaba en manos de su marido.
La mujer está internada en un sanatorio cuyo presidente es el Dr. Ricardo H. Piccinin, su Vice-Presidente, Mario L. Piccinin y la directora Lic. Karina A. Piccinin. Todos familiares del corredor de TC Pista que se encuentra detenido, acusado del delito de lesiones graves calificadas por el vínculo y por el uso de arma de fuego.
La versión de la joven baleada generó la detención del corredor. La esposa del corredor de autos actualmente no presentaba riesgo de muerte por la herida de bala sufrida en el muslo izquierdo. Ella dijo que Piccinin le disparó con una escopeta. Pero como una moneda, la realidad siempre tiene dos caras.
Sobre Romina, los allegados a Toto y sus amigos denuncian que en realidad el corredor estaba sufriendo una violencia psicológica diaria. Cuestiones de pareja, dicen, que llegaron a humillarlo en reiteradas oportunidades en presencia de los propios amigos. Aseguran que lo amenazó con quitarse la vida si las cosas no eran como ella quería.
La violencia –según el relato de sus amigos- provocó al menos en dos oportunidades que el piloto la tuviera que llevar de urgencia a su propia Clínica Constituyentes, aseguran sus allegados por las heridas que ella misma se habría provocado.
Los enojos de Romina eran producto de que la mujer no toleraba su poca participación que le daban en el directorio de la empresa familia. “El acoso psicológico fue creciendo se lo trataba como un inútil, y la paciencia de Toto se agotó, y el amor se extinguió”, reconoce una amiga del detenido. La pareja compartía techo, pero a fines de octubre Toto le exigió a Romina la separación definitiva, ofreciéndole un acuerdo económico si existía una desvinculación pacífica.
A los días Toto fue denunciado en la comisaría por abandono de hogar. En la primer semana de octubre, luego de la denuncia, Romina habría ingresado a la vivienda que compartían, cuando el corredor no estaba y vació el chalet de la calle Virrey Liniers, llevando entre otras cosas plasmas, LCD, ropa de él, hasta la vajilla que su madre le había regalado. Esta situación fue observada con asombro por los propios vecinos de la ex pareja cuando ella, su hermana y un hombre cargaba todo en la camioneta 4×4 que en un pasado más feliz Toto le había regalado.
Dos días después, cuando el corredor ya enterado que su mujer lo había desvalijado, a las 2 de la mañana siente como abren la puerta de su casa. Lo que provoco que tomara la escopeta ante la posibilidad de que se tratara de un robo y se encuentra que en realidad era su ex pareja. Gritos, empujones, y se dispara el arma. “Romina además de estar desequilibrada era profesora de Taekwondo y trató de sacarle la escopeta de la mano y el arma se dispara, causándole una herida en su pierna”, dice Gabriel quien estuvo con Toto y ya declaró en la a causa penal que está la UFI 7 de Morón. Luego del tiro, Toto traslado al Hospital Posadas inmediatamente a Romina.
Dos versiones opuestas, un matrimonio y separación conflictiva. Hoy, los peritos balísticas, son la pieza clave de esta causa penal. Deben considerarse las dos versiones: la de la mujer que sostiene que el le disparó en forma adrede y la de él que asegura que fue un accidente.