El policía que mató a dos personas e hirió a otras 17 en un boliche bailable de la localidad puntana de Naschel se encontraba ebrio, ya que tenía 1,67 miligramos de alcohol en sangre, informó esta tarde el ministro de Seguridad provincial, Martín Olivero.
Entre los dos muertos se encuenta un comisario. El policía ingresó a los tiros, por motivos que se investigan, a un boliche de la localidad de Naschel, en la provincia de San Luis, informaron fuentes policiales.
A raíz del suceso, que conmocionó a ese pueblo de sólo 3.500 habitantes y que tiene pocos antecedentes, el gobernador Sergio Poggi decretó tres días de duelo por «el dolor y la consternación por el conmovedor hecho».
Todo se inició alrededor de las 4.30 en el local «Natacha Disco», situado en la esquina de San Martín e Independencia, de Naschel, localidad ubicada a 120 kilómetros al norte de la capital provincial, adonde el inspector Walter Talquenca (40) entró alcoholizado.
El intendente local, Marcos Bértola, dijo al canal C5N que el policía había estado en el boliche con su esposa, tomó algo y cuando aparentemente la mujer se fue, él fue a buscar el arma reglamentaria, una pistola 9 milímetros, a su auto, un Renault 12.
Según el dueño del boliche, Martín Estrada, él estaba en la parte trasera del local cuando vio que el policía «venía disparándole a todo el que se le cruzaba», en momentos en que allí había unas 280 personas.
Luego de que se abrieran las salidas de emergencia para que la gente pudiera salir, el policía intentó escapar.
«Cuando me di vuelta, me estaba apuntando a mí, pero terminó disparándole al comisario Barrios cuando lo quiso reducir. Eso nunca me lo voy a olvidar”, aseguró Estrada a medios locales.
«Empezó a disparar como si estuviera matando animales», relató una joven que se identificó como Milagros y que recibió un balazo en la rodilla cuando se dirigía hacia el baño con su hermana. La joven contó que se desmayó por el dolor, pero alcanzó a ver cómo la gente corría y gritaba asustada.
Otra chica mostró que ella también fue baleada en el hombro, pero aseguró que se encontraba en la vereda del pub ubicado al lado del boliche, por donde -según su relato- el policía pasó caminando y efectuó los primeros disparos.
Según el intendente de Naschel, tras matar al comisario, identificado como Julio Marcelo Barrios (43), el policía huyó del lugar.
«Sale de ahí, va a un casino que está enfrente, efectúa disparos, va hasta una comisaría que está ahí y sigue disparando, pero el que estaba de guardia le tuvo que disparar para detenerlo», relató.
Según Barrios, el policía es «una persona de perfil bajo, tranquila», por lo que no entiende qué pasó en el local.
Según dijeron voceros policiales consultados por la agencia Télam, Talquenca disparó las 13 balas de su cargador, pero hubo más lesionados producto de los rebotes en los espacios reducidos.
Ayer a la tarde, de los 17 heridos, nueve habían sido dados de alta y ocho continuaban internados, siete en el hospital de San Luis y , uno en el de Villa Mercedes, informó el ministro de Salud, Gastón Hissa.
De estos pacientes, dos permanecían en terapia intensiva por heridas de bala en abdomen y tórax, una joven estaba siendo operada y cinco ya habían sido pasados a sala común. Mañana habrá un nuevo parte a las 9.
Tras ser detenido, al policía se le efectuaron los estudios correspondientes y se determinó que tenía 1,67 miligramos de alcohol en sangre, informó esta tarde el ministro de Seguridad provincial, Martín Olivero. Para tener un parámetro, por ejemplo, el máximo tolerable de alcohol en sangre para conducir es de 0,5 mg.
El funcionario afirmó que, según surge de su legajo personal, el inspector «no tiene antecedentes violentos» sino que era «de buen trato con sus camaradas y el público en general».
Por orden del Juzgado Multifuero de Concarán que interviene en el caso, en las próximas horas se le realizarán pericias psicológicas para evaluar su estado mental y se le tomará declaración indagatoria, según informaron fuentes judiciales.
Además del comisario, murió en el boliche en forma instantánea un camionero oriundo de la localidad bonaerense de Rojas, Fernando Brizuela (37), que estaba allí con un grupo de amigos.
El gobernador Poggi intervino desde un primer momento en el hecho y dijo estar «conmocionado».
Detalló que Talquenca «también está herido porque al momento de detenerlo y perseguirlo hubo una gresca policial porque huía», así que permanece hospitalizado en calidad de detenido.
Poggi informó que «es un oficial de años de antigüedad» que, si bien desarrolla su actividad en la localidad vecina de El Morro, vive en Naschel, esta madrugada «estaba de franco» y había concurrido al lugar más temprano acompañado de su esposa.
«Esta es una tragedia muy difícil de explicar en estos momentos», dijo Poggi cuando fue consultado si se conocían los motivos que generaron la conducta del inspector.