Balas que pican cerca, decía un gran relator de fútbol cuando una pelota pasaba cerca del arco. Pues bien, el juez federal de Lomas de Zamora Federico Villena ordenó un allanamiento en la casa de Darío Nieto, secretario privado de Mauricio Macri durante su gobierno.
El allanamiento fue ordenado en el marco de la causa por el espionaje ilegal a políticos, periodistas, jueces, gremialistas y presos. Hasta ahora el nombre de Nieto no había trascendido en el marco de esta investigación, que permanece bajo secreto de sumario.
El nombre que había trascendido como muy cercana a Macri involucrada en la trama de espionaje fue la ex directora de Documentación Presidencial, Susana Martinengo, quien presuntamente recibía informes de los seguimientos y se los entregaba a Nieto.
Martinengo apareció en la causa luego de que la querella de Cristina Kirchner aportara registros públicos de la Casa Rosada que comprobarían que recibió a agentes de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) en su oficina.
Reuniones en la Rosada
También el nombre de Martinengo fue aportado por algunos de los exagente de las AFI que figura como imputados en el expediente. Martinengo habría mantenido reuniones dentro y fuera de la Casa Rosada con los agentes que operaban bajo las órdenes de Alan Ruiz, detenido ya en otra causa.
“Pero ese no sería el único indicio del juez para disponer esta avanzada sobre el ex secretario de Macri, indicaron a Infobae las fuentes consultadas”, consigna la agencia fundada por Daniel Haddad.
Villena investiga una organización integrada por miembros de distintas agencias de seguridad –la AFI, Policía de la Ciudad de Buenos Aires y el Servicio Penitenciario Federal– que junto a abogados y funcionarios de otros poderes del Estado llevaron adelante distintas actividades en violación a la Ley 25.520.
Una parte de esa asociación ilícita se dedicaba al espionaje a representantes políticos o periodistas. Otra parte del expediente apunta a saber cómo se habría monitoreado a detenidos ligados al kirchnerismo.
Como llegó a Macri
Mientras desfilaban víctimas del espionaje por el juzgado, personal de la Policía Federal se presentó en un edificio de la calle Guatemala al 4700, en el barrio de Palermo. Allí vive con su familia Darío Nieto, ex secretario privado administrativo de la Coordinación General de Asuntos Presidenciales, durante el gobierno de Macri.
“Tras un paso como asesor ad honorem junto al legislador porteño Jorge Sanmartino, del grupo Recrear de Ricardo López Murphy, Nieto se metió en la juventud PRO: pasó por el Consejo de los Derechos del Niño, y de ahí al despacho del legislador porteño Francisco Quintana. Trabajó con Marcos Peña en la campaña y después se convirtió en el secretario privado de Macri”, recuerda Infobae.
El sitio de Haddad agrega que cuando la policía a su casa, hubo un pequeño altercado: trascendió que, al verse sorprendido, Nieto se metió en su auto en vez de habilitar el camino para que entraran al domicilio. Eso derivó en que corrieran los rumores de una detención, que no se concretó.
En unos minutos, Nieto bajó del auto y franqueó el acceso a la vivienda, donde el personal policial se encontraba revisando y secuestrando el material buscado, informaron a Infobae las fuentes consultadas.
Agendas y computadoras
La orden era secuestrar “agendas telefónicas, computadoras, celulares, pendrives y notebooks, junto con documentación o anotadores que pudieran ser de interés para esta causa. Se trata de la misma orden que se dio para todos los involucrados a la hora de proceder a la búsqueda de información.
“El procedimiento se ordenó en busca de evidencias, tras las declaraciones de imputados en el caso, que nombraron a Nieto como uno de los posibles autores de las directivas para las maniobras. El magistrado ordenó el secuestro de agendas, teléfonos celulares y otras evidencias”, consignó la agencia Télam.